Te mostramos como con el paso del tiempo cada vez más personas se sienten identificadas con el movimiento LGBTQI+.

Poco a poco la población se ha encargado de erradicar algunos estereotipos sociales, con el fin de desarrollar un mundo más “armónico”, donde las diferencias raciales, religiosas y de preferencias de género han sido poco a poco eliminadas; no obstante aún quedan bastantes barreras por tirar ante un mundo lleno de discriminación.

De acuerdo con información de Latinobarómetro sobre la discriminación en América Latina, los Homosexuales son altamente discriminados en México, pero esta es solo una de las preferencias de género que hay en la actualidad, a las cuales el movimiento LGBTQI+ busca representar

El término LGBTQI+ está conformado por las siglas de palabras lesbiana, gay, bisexual, transgénero, transexual, travesti, intersexual y queer, pero el símbolo + se le añadió para incluir a todos aquellos colectivos restantes que no se encuentran representados en las siglas anteriores. Ante la llegada de este, o más bien de su abierta exposición, la población y las marcas han optado por llevar a cabo algunas iniciativas que cada vez más buscan aceptar la presencia de esta comunidad, incluso mediante el mismo uso del lenguaje inclusivo (el cual aún no logra ser del todo bien recibido por la mayor parte del mundo).

A pesar de esto, la aceptación o integración de personas identificadas como LGBTQI no solamente busca fomentar un mundo más diverso, sino que las marcas que apuestan por realizar estrategias arriesgadas (teniendo en cuenta que esta inclusión aún se encuentra en una cierta lucha) para mostrarse a favor de la comunidad, hecho que les ayuda a adquirir algunas fortalezas en cuanto a imagen se refiere, donde el rubro de la misma y el mercado al cual está dirigido son de vital importancia a contemplar para que estas tengan éxito (o de lo contrario perderían ganancias).

De acuerdo con un estudio de McKinsey, aquellas empresas que cuentan con equipos “diversos” pueden llegar a representar hasta un 25 por ciento más de rentabilidad a comparación de aquellas que no promueven este tipo de cultura organizacional, siendo esta una buena oportunidad a tomar en cuanta al momento de incrementar la productividad dentro de una organización.

Esto lo hemos visto presente en las empresas mediante un sinfín de estrategias, tanto aquellas que buscan contratar exclusivamente a personas identificadas LGBTQI con una creativa publicidad, así como aquellas que buscan realizar algunas disruptivas campañas que han logrado generar una cierta controversia en diferentes países del mundo.

Esto se debe en parte a que las marcas buscan mostrarse como vanguardistas y a favor de la evolución y erradicación de estereotipos negativos que impiden una convivencia armoniosa entre entes, mientras que al mismo tiempo fortalecen su imagen hacia este relativamente nuevo mercado.

De acuerdo con un estudio realizado por Barnizar, se concluyó que los consumidores esperan que las marcas se encuentren adaptándose a las diferentes culturas y estilos de vida al momento de hacer publicidad, teniendo como consecuencia que aproximadamente el 63 por ciento de los clientes opten por adquirir productos o servicios de empresas que muestren este tipo de valores ante la sociedad.

Cada vez más marcas se encuentran uniéndose a esta iniciativa y fortaleciendo su imagen ante los consumidores “del futuro”, ¿qué tan efectiva será esta estrategia ante sus consumidores más antiguos?

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