Desde su histórica elección en junio de 2024, Claudia Sheinbaum asumió la presidencia de México en octubre, marcando un hito como la primera mujer en ocupar este cargo. Su llegada al poder fue recibida con un apoyo popular significativo, logrando casi el 60% de los votos en los comicios. Este respaldo se ha mantenido estable durante sus primeros 100 días de gestión, un período en el que su liderazgo se ha consolidado entre la ciudadanía.

De acuerdo con una reciente encuesta de El Financiero, la popularidad de Sheinbaum se mantiene en niveles elevados, con un 78% de los encuestados aprobando su desempeño en el gobierno. Esta cifra representa un notable incremento respecto a meses anteriores, alcanzando su punto más alto desde que asumió el cargo. Además, el 66% de los participantes en la encuesta opinan que su administración ha gestionado de manera eficaz los temas económicos hasta el momento.

Sin embargo, a pesar de los altos índices de aprobación, la inseguridad sigue siendo el principal desafío del gobierno de Sheinbaum. A lo largo de estos primeros 100 días, las preocupaciones de la ciudadanía sobre la violencia y la falta de seguridad se mantienen como los aspectos con mayor nivel de insatisfacción. Aunque su popularidad es sólida, el nuevo gobierno enfrenta la urgente necesidad de abordar este problema para garantizar que la confianza del pueblo en su liderazgo no se vea afectada a medida que avanza su mandato.

Y es que, con la asunción de Donald Trump como presidente, el panorama internacional se ajusta a un nuevo ciclo político que divide opiniones, especialmente en un momento de incertidumbre para muchos latinos quienes se encuentran en los Estados Unidos, y es que se mencionó que hasta el momento hay un registro promedio de más de 4 mil deportados mexicanos que llegaron a nuestro país.

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