En un contexto de creciente conciencia sobre la salud, el medio ambiente y el bienestar animal, el veganismo y el vegetarianismo están ganando popularidad. La gráfica del día destaca cómo cada vez más consumidores a nivel global están buscando alternativas a la carne, influenciados por diversas razones.
La tendencia hacia dietas basadas en plantas se está consolidando, y esto se refleja en la expansión de la oferta de productos veganos y vegetarianos en restaurantes y supermercados. Las alternativas a la carne, como hamburguesas vegetales y sustitutos de productos lácteos, se están volviendo más accesibles y variadas, facilitando la transición para quienes buscan reducir o eliminar el consumo de carne.
El bienestar animal es un importante factor en la decisión de muchos consumidores de seguir dietas veganas o vegetarianas, por lo que su deseo de reducir el sufrimiento y la explotación de los animales está impulsando la demanda de productos que imitan la carne sin implicar la crianza y el sacrificio de animales.
En ese sentido, la macroencuesta Statista Consumer Insights reveló que el Reino Unido lideró con el mayor porcentaje de consumidores regulares de productos sustitutos de carne, alcanzando hasta el 18%. Mientras que China y Sudáfrica siguen de cerca con un 17% y un 16%, respectivamente.
En países como Italia e India, donde las dietas tradicionales ya incluyen una amplia variedad de platos vegetales, también se observa una notable adopción de alternativas a la carne, con un 15% en ambos casos. En Brasil, el 14% de la población consume estos productos.
Argentina, España y Estados Unidos, todos con un 12%, presentan un dato interesante: a pesar de sus fuertes tradiciones carnívoras, especialmente en el caso de Argentina, conocida por su cultura de carne bovina, más del 10% de la población encuestada está adoptando regularmente alternativas a la carne. Esto sugiere un cambio hacia dietas más diversificadas en estas regiones.
México, con un 11%, se sitúa justo detrás de estos países, mientras que Japón muestra el porcentaje más bajo, con solo un 5% de consumidores regulares de alternativas a la carne. Este bajo porcentaje puede estar relacionado con la prominencia del pescado en la dieta tradicional japonesa.