La cerveza se ha consolidado como una de las bebidas más consumidas y apreciadas en todo el mundo, desempeñando un papel destacado en diversas culturas y tradiciones. Su historia se remonta a miles de años, y hoy en día, sigue siendo una bebida esencial en celebraciones, reuniones sociales y momentos de relax.
Y es que la popularidad de esta bebida varía de un país a otro, pero su influencia es indiscutible. En Europa, países como Alemania, Bélgica y República Checa son conocidos por sus tradiciones cerveceras y la calidad de sus cervezas. Alemania, famosa por su Oktoberfest, y Bélgica, con su rica historia en cervezas artesanales, son ejemplos de cómo la cerveza está arraigada en la cultura local.
Como dato curioso, hay que tener en cuenta que cada primer viernes de agosto, el Día Internacional de la Cerveza celebra esta pasión compartida, una tradición que comenzó en 2007 cuando un grupo de amigos decidió rendir homenaje a su bebida favorita.
Según los datos de Statista Consumer Insights, España es el país que lidera la lista de países con mayor consumo de cerveza con alcohol, con un 51% de los encuestados indicando que la beben regularmente. En contraste, la cerveza sin alcohol cuenta con un 21% de popularidad, aunque también la sitúa por encima de muchos otros países.
Como era de esperarse, México sigue de muy de cerca a España con un 50% de aprobación para la cerveza con alcohol y tan sólo un 8 % en el consumo de cervezas sin alcohol, siendo uno de los países más bajos en ese sentido.
Mientras que China, el mayor productor mundial de cerveza en 2022 con 360 millones de hectolitros, presentó una cifra significativa con el 40% de sus habitantes consumiendo esta bebida con alcohol a menudo.
Por otro lado, Alemania, conocida por su arraigada tradición cervecera y el famoso Oktoberfest, sorprendió con un dato muy moderado, ya que tan sólo un tercio de los alemanes afirma beber cerveza con alcohol de forma habitual, mientras que un 15% prefiere la versión sin alcohol.
En Estados Unidos, los porcentajes de consumo son aún menores, y en India, donde el consumo de alcohol está restringido en varios estados.
Es así que estos datos subrayan cómo la cerveza, aunque universal en su apreciación, varía en popularidad y consumo dependiendo de factores culturales y legales en diferentes regiones del mundo.