En los últimos años, la industria de la música ha experimentado una transformación radical, impulsada principalmente por el auge del streaming. Y es que esta revolución tecnológica ha redefinido la forma en que consumimos y accedemos a la música, generando cambios significativos en todos los aspectos del negocio musical.
El surgimiento de plataformas de streaming como Spotify, Apple Music y Deezer ha democratizado el acceso a la música, permitiendo a los usuarios disfrutar de un vasto catálogo de canciones en cualquier momento y lugar, con solo unos pocos clics. Esto ha supuesto una disminución y casi extinción en la venta de música física, como CDs y vinilos, así como una reducción en las descargas digitales.
Para los artistas, el streaming ha creado nuevas oportunidades, pero también nuevos desafíos. Por un lado, las plataformas ofrecen una forma de llegar a audiencias globales y generar ingresos a través de la reproducción de sus canciones. Por otro lado, el modelo de compensación de las plataformas ha sido objeto de críticas, ya que los ingresos por reproducción suelen ser bajos, especialmente para artistas emergentes.
Además, el streaming ha transformado la manera en que se descubre la música. Las playlists curadas por algoritmos y por expertos han ganado popularidad, convirtiéndose en una forma clave de encontrar nueva música y de promocionar artistas. Esto ha llevado a cambios en las estrategias de marketing y promoción de los sellos discográficos y artistas, que ahora buscan conseguir la inclusión en playlists populares para aumentar su visibilidad y alcance.
Cabe destacar que no a todas las plataformas les va de la misma manera, pese a la tendencia positiva experimentada por las diferentes plataformas, ninguna ha logrado acercarse a los números de Spotify, ya que engloba cerca del 32% de los suscriptores globales de la música en streaming, lo que supone más del doble que la cifra alcanzada por el que continúa siendo uno su máximo rival, Apple Music. Esta situación, sin embargo, podría cambiar en el futuro si se considera el auge que ha tenido recientemente Amazon Music.
Gráfica del día: Los ingresos de la música grabada a nivel mundial
La industria musical experimentó un crecimiento continuo en 2023, según la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI). Los ingresos mundiales de la música grabada alcanzaron los 28.600 millones de dólares, un aumento del 10% respecto al año anterior. Este crecimiento marca el noveno año consecutivo de la industria tras décadas de declive. La transición a la distribución digital, aunque inicialmente causó problemas, ha revitalizado la industria. Las ventas de música en formato físico disminuyeron significativamente entre 2001 y 2010, pero las ventas digitales comenzaron a compensar esta pérdida. Es así que los servicios de streaming se convirtieron en el principal impulsor de ingresos, representando el 67% del total de ingresos en 2023, con 667 millones de suscriptores a nivel mundial.