Ambas disciplinas han ganado adeptos debido a sus beneficios tanto físicos como mentales. El yoga, originario de la India, se centra en la conexión entre el cuerpo y la mente a través de posturas (asanas), técnicas de respiración (pranayama) y meditación. Es conocido por mejorar la flexibilidad, la fuerza y reducir el estrés.
Por otro lado, los pilates, desarrollados por Joseph Pilates a principios del siglo XX, se enfocan en fortalecer los músculos centrales, mejorar la postura y la coordinación corporal. Ambas prácticas han sido adoptadas a nivel global, con millones de personas participando en clases regulares en gimnasios, estudios especializados e incluso en línea a través de plataformas digitales.
Esta popularidad se debe en parte a la creciente conciencia sobre la importancia del bienestar físico y mental, así como a la accesibilidad creciente de clases y recursos en línea. Además, el yoga y los pilates han sido reconocidos por sus beneficios terapéuticos en la rehabilitación física y en la gestión del estrés, atrayendo a una amplia gama de practicantes, desde atletas hasta personas mayores y aquellos buscando un equilibrio integral en su estilo de vida.
Gráfica del día: La popularidad del yoga y los pilates
Según los datos de la encuesta Statista Consumer Insights, la popularidad del yoga y el pilates varía significativamente entre países. En la India, conocida como la cuna del yoga, el 29% de la población practica estas disciplinas. Mientras que en España, el 16% participa en ellas de manera ocasional.
En México, el interés alcanza al 17% de la población, superando ligeramente a Brasil, donde es del 14%. Aunque, en contraste, tanto en Francia como en Japón, el porcentaje es del 13%, lo que sugiere un menor entusiasmo relativo por estas prácticas en comparación con otros países encuestados.