La industria turística es un importante generador de empleo en Europa. Más de 25 millones de personas trabajan directamente en sectores vinculados al turismo, como la hotelería, transporte, gastronomía y cultura. Además, el sector estimula la creación de empleo en otras áreas indirectas, como la construcción, el comercio minorista y los servicios financieros. Esta característica lo convierte en una de las principales fuentes de trabajo en Europa, especialmente en países del sur del continente.
El turismo también ha fomentado la capacitación y el desarrollo de habilidades, tanto para trabajadores locales como para aquellos provenientes de otros países de la Unión Europea. Esto ha dado lugar a una mano de obra más calificada y versátil, lo que, a su vez, contribuye al fortalecimiento de otros sectores de la economía.
De hecho, Lisboa y París destacan por su alta proporción de alojamientos de Airbnb en relación con su población: ambas superan las 45 propiedades por cada 1,000 habitantes. En términos absolutos, De hecho, Lisboa cuenta con aproximadamente 24,000 alojamientos, mientras que París alcanza los 90,000. No obstante, según el registro oficial, a principios de año había más de 60,000 alquileres temporales registrados en el Ayuntamiento de París, justo antes de los Juegos Olímpicos. En otras ciudades como Copenhague y Venecia, la densidad es menor, rondando los 32 a 33 alojamientos por cada 1,000 habitantes, y aún más baja en Roma y Barcelona, con aproximadamente 12 por cada 1,000 habitantes.
Gráfica del día: El turismo contribuye a la mejora de la economía europea
El sector de los viajes y el turismo se ha consolidado como una de las fuerzas más dinámicas y fundamentales en Europa, contribuyendo significativamente a la economía de la región. Este sector no solo impulsa el empleo y genera ingresos, sino que también favorece el desarrollo de las regiones y respalda a las comunidades locales.
Particularmente, Croacia se destaca como uno de los países más dependientes del turismo, ya que este sector representó el 25% de su PIB en 2023. En otras grandes economías europeas como Alemania, Francia y el Reino Unido, los viajes y el turismo también desempeñan un papel crucial, aunque su aporte es algo menor, rondando el 10% del PIB de cada nación. A pesar de ser proporciones más pequeñas, sigue siendo un motor económico importante para estos países, reflejando la relevancia que la industria tiene a nivel europeo.