La carrera por el desarrollo de la tecnología de vehículos autónomos además de sumar cada vez más competidores, debido a que la industria ve un futuro promisorio, también ha registrado enfrentamiento entre grandes marcas: Uber y Google son las protagonistas.
Sucede que el mercado de la conducción autónoma es uno en notable crecimiento, según estimaciones de Strategy Analytics, tendrá un valor de 7 mil millones de dólares durante 2050 y, son Estados Unidos, China y Europa occidental los principales mercados.
Pero, así como es atractivo y ha ido sumando un gran número de marcas como Tesla, Ford, General Motors, Nissan, Hyundai, Honda, Toyota, Chevrolet, o tecnológicas del tamaño de Apple y Samsung, también es motivo de enfrentamientos.
Tal es el caso de Uber y Google, debido a que la tecnológica de Mountain View acusa a la startup de San Francisco de la apropiación indebida del secreto comercial, la infracción de patente y la competencia desleal.
Esta semana, ambas compañías se presentaron ante un tribunal federal de San Francisco para un proceso judicial que atañe a marcas propiedad de ambas firmas: Waymo (de Alphabet) y Ottomotto, adquirida por Uber.
Sin embargo y, a diferencia de casos similares, la disputa se resolvió a sólo unos días de haber iniciado en los tribunales y todo fue mediante un acuerdo extrajudicial en el que Uber acordó entregar a Waymo, el 0,34 por ciento de sus acciones.
De acuerdo con un reporte The New York Times, los términos del acuerdo se basan el valor actual estimado de la compañía de traslados, en 72 mil millones de dólares, lo que significa que la participación de la unidad Alphabet sería de aproximadamente 240 millones de dólares.