- El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, es acusado de acoso sexual por varias mujeres y Joe Biden, presidente de EE.UU. pide su renuncia
- Cada vez más, van saliendo casos de acoso sexual por parte de políticos, lo cual pone en entredicho la confianza de las personas en dicho sector
- Bajo este panorama, ¿cómo debe actuar el marketing político para retomar la confianza de los ciudadanos?
Joe Biden, presidente de Estados Unidos, pidió al gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, que renuncie a su cargo a causa de las acusaciones de acoso que se han dado a conocer en los últimos días.
Estamos ante un contexto complicado en muchos sentidos: económico, social, político, ambiental y, quizás, hasta moral. La llegada de la pandemia sacudió todos los males que se han adentrado en la sociedad y que, hasta ahora, no habíamos querido ver.
Desde hace unos años, las redes sociales se han encargado de darnos a conocer todo aquello que no podemos encontrar de otra forma. Así, han salido a la luz casos de acosos sexual, acoso laboral, bullying, etcétera, que, de no ser por lo difundido en redes sociales, no habríamos sabido de su existencia.
No es nada nuevo
Lamentablemente, el tema no es nuevo, no es de estos tiempos, sino que lleva décadas viviendo en el silencio. Sin embargo, llega un momento en el que todo explota y la información sale a la luz, llevándose todo a su paso.
Todo esto viene a las recientes acusaciones que han girado en contra del actual gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, las cuales han llegado a la Casa Blanca, donde el mandatario estadounidense, Joe Biden, pidió en conferencia de prensa la renuncia de Cuomo. “Creo que debería renunciar”, mencionó.
El tema, en sí, es delicado, sobre todo tratándose de una figura política que aspira a representar a un cúmulo de la sociedad. Incluso, las campañas de marketing de los políticos, en todos los niveles, están orientadas en ese mismo objetivo.
Por supuesto, Cuomo ha negado tales afirmaciones, mencionando que nunca cometió ningún acto de acoso en contra de ninguna mujer, pese a que un informe de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, refiere que alrededor de 179 personas, entre denunciantes y miembros actuales y anteriores de la cámara ejecutiva, hicieron declaraciones en contra de la conducta del gobernador de NY.
El resultado de la investigación, según la fiscal, arrojó “imagen profundamente perturbadora pero clara” de un lugar de trabajo tóxico y un clima de miedo en el que Cuomo acosó sexualmente a múltiples mujeres, muchas de ellas jóvenes”, de acuerdo con información publicada por Forbes.
Mientras se revela la veracidad de dicha investigación, lo que queda claro es que, prácticamente, ya no se puede creer en nade, ni siquiera en los políticos, que son quienes deberían trabajar por la seguridad de la comunidad.
Ante esto, se pone en jaque la imagen del político -no solo de Cuomo-, este ser pensante que, en tiempos de campaña, se acerca a la gente y pide su voto para representarlos como gobernador, alcalde, presidente, o cualquier otro cargo.
El papel del marketing político
El marketing para un político es vital a la hora de hacer campaña y requiere de una gran precisión para consolidar el proyecto -el proyecto político-. Pero, cuando salen a relucir noticias como esta, lo que queda claro es que, sí, el marketing político fue efectivo, pero la imagen del político (llámese gobernador, presidente, alcalde, etc.) es la que queda a la deriva y la pérdida de la confianza se hace más grande.
El reto, en parte, es para los diseñadores de las campañas políticas al tratar de presentar a un candidato que cumple ciertos rasgos sociales (cercano a la gente, solidario, resolutivo, entre otros), pero también el reto es recobrar la confianza que cada vez se pierde más.
Cada día nos enteramos de casos similares, en los que políticos se ven inmiscuidos en acusaciones de dicha índole. Por mencionar un ejemplo cercano, el caso de Félix Salgado Macedonio, quien fue bajado de su candidatura debido a acusaciones de acoso sexual.
En tiempos donde la imagen ha cobrado un valor importante (las redes sociales juegan un papel importante en todo esto), es necesario llevar a cabo un buen conocimiento de los políticos candidatos a cualquier cargo de poder.
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