• Ante las noticias de esta aprobación de los inversionistas, las acciones de Fiat-Chrysler en Milán se dispararon en un 2.5 por ciento

• Por su lado, los títulos de Peugeot en París lograron aumentar su valor en 3.4 por ciento

• Se espera que los nuevos cuarteles generales de las compañías, bajo el nombre de Stellantis, se ubiquen en los Países Bajos

La formación de Stellantis está más cerca que nunca. De acuerdo con Reuters, inversionistas de Peugeot acaban de dar su visto bueno a la fusión de esta automotriz con Fiat-Chrysler. La tasa de aprobación fue de cerca de 99.85 por ciento, incluyendo sus más grandes accionistas. La agencia señala que es uno de los últimos grandes pasos que deben sortear las empresas para oficialmente mezclarse en la cuarta empresa más grande dentro de su ramo en el mundo.

Entre los grandes inversionistas de Peugeot que aprobaron el trato se cuenta la familia de su fundador, Dongfeng Motor Corporation y el gobierno de Francia. En datos de Market Screener,  accionistas de Fiat-Chrysler también ya aceptaron el proceso, con una tasa de aprobación de 99 por ciento. Así pues, se espera que pronto se de a conocer la fecha tentativa para finalizar la fusión. Después de este proceso, las compañías adoptarán el nuevo nombre de Stellantis.

De acuerdo con el CEO de Peugeot, Carlos Tavares, las dos marcas están listas para seguir adelante y completar la fusión. Asimismo, señaló que su empresa y Fiat han obtenido ya todos los análisis regulatorios necesarios para obtener el visto bueno de las autoridades. El directivo, que estará al frente de la nueva organización, tendrá bajo su control 14 marcas icónicas en el sector automotriz europeo y americano. Entre ellas, Maserati, Jeep, Dodge, Ram, Citroen y DS.

¿Que hace falta para completar la fusión de Fiat-Chrysler y Peugeot?

Con los accionistas de ambas compañías a bordo, realmente no hay mucho más en el camino de Fiat y Peugeot para dar por terminado con su fusión. De acuerdo con Reuters, para octubre pasado ya se habían obtenido los vistos buenos en materia de competitividad de 14 gobiernos en todo el mundo. Entre ellos se incluían varios de los mercados más grandes en el sector de automotriz. En concreto, ya tenían luz verde de Estados Unidos (EEUU), Rusia, China y Japón.

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Hace poco también obtuvieron la aprobación de la Comisión Europea, pero no sin que se les pusieran ciertas condiciones. Peugeot y Fiat se comprometieron a hacer varias concesiones para asegurar la supervivencia de varias Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs) dentro del sector automotriz regional. Además, de acuerdo con AP, falta que se lancen al mercado de valores las acciones de Stellantis para que la compañía empiece a operar de forma oficial.

Se espera que la unión de Fiat y Peugeot opere tanto en Nueva York como en París y Milán. Si bien ambas empresas ya anunciaron en comunicados que ya tienen la aprobación de varias de las bolsas donde operará Stellantis, no es claro cuándo se listará la nueva compañía. Más allá de estos pendientes, de acuerdo con Cyprus Mail, hay otros retos que se deberán atender en el corto plazo. Entre ellos, las secuelas de la COVID-19 y la transición a los autos eléctricos.

Los complejos retos de las fusiones

No es extraño que Peugeot y Fiat estén enfrentándose a tantas barreras para tratar de finalizar su unión en Stellantis. Hay un sinfín de ejemplos que demuestran qué tan complejo es obtener la luz verde de todos los agentes involucrados para llevar a cabo este tipo de operación. Ahí está el caso de ViacomCBS. Si bien el proceso fue relativamente acelerado, hubo un momento de incertidumbre a la hora de definir cómo sería la identidad gráfica de la marca a largo plazo.

Tan solo decidir si es conveniente una fusión como la de Fiat y Peugeot es un proceso difícil en sí mismo. En febrero pasado Nokia empezó a considerar la posibilidad de unirse con Ericsson. La decisión habría sido parte de un análisis de opciones para impulsar su modelo de negocio en el largo plazo. Si bien no era la única opción disponible, si era una de las alternativas más complejas en la mesa. Aún no parece que la gigante telecom se haya decidido a tomar esa vía.