El 44 por ciento de los millennials encuestados por Gallup señala no sentirse seguro al compartir información con las compañías. El dato resalta en un entorno en donde las fugas de información y hackeos se dan con mayor frecuencia y que, incluso, llegan a cobrar impacto internacional.
Las fugas de información, así como los hackeos a marcas de renombre llegan a repercutir en la seguridad de los consumidores, pues se deja sin protección una serie de datos vulnerables. Pese a esto, sólo algunos son los que llegan a recabar la preocupación del público.
Estudios de Harris Interactive proyectado por Statista revelan que el dato personal que más preocupa al consumidor al momento de una fuga de información es su número de seguridad social, pues cuenta con el 45 por ciento de las señalizaciones. Otro también de relevancia es la que tienen relación con los bancos como estados, revelada por el 27 por ciento de los encuestados, al igual que el número de tarjeta.
La familia también incurre en el tema, pues el nombre de los hijos atañe al tres por ciento, así como la dirección y número telefónico, revelado por el dos por ciento. Las fotografías explícitas y videos ocupan el último lugar con un 2 por ciento de menciones, es decir, los documentos externos tienen mayor peso en cuanto a filtración en internet en comparación con documentos en donde sale la imagen propia.
vale señalar que la seguridad de información que cada compañía le da a los datos personales de sus consumidores no tiene relación, ya que grandes corporaciones como Apple han pasado por problemas relacionados con esto. El ejemplo más claro se dio en el 2015 a través de su tienda de apps móviles, ya que fue afectada por malware, motivo que llevó a la compañía de Palo Alto Networks a calificar este acontecimiento como “el mayor robo de cuentas Apple causado por malware”.