En 2016, se hizo una fuerte crítica a los Premios Óscar que los acusaban de racistas, “Moonlight”, la ganadora a mejor producción hizo historia al convertirse en la primera pieza cinematográfica hecha totalmente por afroamericanos, independientemente del error que empañó la ceremonia en su parte final cuando se leyó de manera equivocada al vencedor.
“Moonlight” narra la complicada vida de un niño que llega a adulto, ayudado por un narcotraficante, en medio de un entorno social descompuesto y su identidad homosexual, temas delicados y más en un entorno conservador que actualmente ocupa el gobierno estadounidense. La película es protagonizada por el ganador como mejor actor de reparto, Mahershala Ali, así como Naomie Harris, Trevante Rhodes y Janelle Monáe.
La cinta ya había dado señales de su fuerza, ya que se enfrentaba a “La La Land”, la máxima nominada para la 89 edición de los premios de la Academia. Además de que ya había ganado el Globo de Oro a mejor cinta dramática, mejor película en los Premios Spirit.
En 2014, “12 Years a slave” ganó como la mejor película, pero no todo su reparto era afroamericano y junto con “Moonlight” fueron producidas por la compañía Plan B de Brad Pitt.
Su director Barry Jenkins también se convirtió en el primer afroamericano en obtener nominaciones para mejor director, mejor película y mejor guión adaptado en el mismo año.
El co-guionista de la película, Joi McMillon, se convirtió en el primer afroamericano en ganar una nominación para el logro en la edición cinematográfica.
Los actores blancos habían dominado las principales categorías de actuación durante los últimos años en esa ceremonia, lo que dio lugar el año pasado a una amenaza de boicot.
Este año, siete de los 20 nominados fueron persona afrodescendientes, un récord histórico para esta minoría en las premiaciones de la academia.
Viola Davis que ganó por “Fences” en mejor actriz de reparto, se convirtió en la segunda mujer afroamericana en ganar un Emmy, un Óscar y un Tony. En contraparte y para esta ceremonia los tres únicos nominados latinos que estuvieron en la competencia no lograron nada.
Estos fueron: el mexicano Rodrigo Prieto nominado por “Silence” en cinematografía, El puertorriqueño Lin Manuel Miranda creador del exitoso musical “Hamilton” en canción original por ‘How Far I’ll Go’ de “Moanna” y el español Juanjo Giménez con Mejor Corto de Acción Real por “Timecode”.
Sin duda, la temporada de premios (incluso en los Bafta a lo mejor del cine británico) fueron marcados con el discurso político contra la nueva administración del presidente Donald Trump.
Durante la entrega de los Óscar, el mandatario fue blanco de bromas del conductor de la ceremonia, el comediante Jimmy Kimmel, quien usó diversos momentos del evento para lanzar dardos sarcásticos.
Mientras que sectores de la industria estadounidense como el automotriz y el tecnológico han mostrado cierto alineamiento a las políticas proteccionistas del empresario neoyorquino, otros sectores como el cinematográfico y el de los medios de comunicación se han mostrado desafiantes con el mandatario de ese país.
Una respuesta directa que ya tuvo la administración Trump a sus detractores fue el bloqueo a algunos medios de comunicación a la sala de prensa de la Casa Blanca, donde CNN, Los Angeles Times, The New York Times y Politico fueron los afectados.
El sector cinematográfico aún no recibe un golpe del gobierno estadounidense, aunque podremos esperar una respuesta muy pronto.