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AMLO estará presente en la edición 89 de la Convención Bancaria en Acapulco
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En el evento los banqueros respaldarán la estrategia del Gobierno en materia económica
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Frenar los instintos del presidente, uno de los objetivos de trabajar de la mano con AMLO
Este viernes se realizará la edición 89 de la Convención Bancaria en Acapulco, la primera en que un presidente de izquierda se encuentra al frente de la administración y del cual en ediciones anteriores se advirtió sobre el riesgo de su llegada al poder.
Incluso, hace un año cuando Andrés Manuel López Obrador asistió al evento, todavía con el mote de candidato, fue él quien lanzó un comentario que no agradó a la mayoría y es que en caso de una nueva derrota, “ya no amarraría al tigre”.
No obstante, su mensaje en aquel momento lejos estuvo de distanciarse de uno de los sectores más poderosos del país, sino de cooperación en un objetivo común, la inclusión financiera.
En la país, de acuerdo con datos del Banco Mundial, el acceso a la banca no rebasa el 40 por ciento de la población total, en tanto, los servicios en línea tampoco representan una opción puesto que no llega si quiera al 10 por ciento; ante este entorno, las Fintech vieron un panorama de oportunidad que ha buscado capitalizar al enfocarse principalmente al pequeño y mediano productor.
Primeras iniciativas y manejo del peso.
Durante sus primeros días en el poder, AMLO tomó la decisión de cancelar el Nuevo Aeropuerto y desde la bancada, Morena, lanzó una iniciativa para eliminar las comisiones bancarias y esto generó una ola de incertidumbre en los inversionistas lo que se vio reflejado de forma negativa en Bolsa.
Sin embargo y a pesar de estas decisiones, la moneda mexicana navega de forma controlada en niveles de las 19 unidades por dólar, con alguno que otro sobresalto pero estable.
A su vez, las finanzas públicas también han sido manejadas de forma inteligente, la inflación está en la zona de rango del Banco de México y la confianza del consumidor, pero en especial, la aceptación tras los primeros 100 días de gestión del presidente están en puntos más que óptimos.
De tal forma que los banqueros han decidido emprender un camino de la mano del Ejecutivo Federal en el que se tratará de erradicar la pobreza del país, pero que también tiene un trasfondo y es: “ayudar a frenar los peores instintos del presidente”.
La declaración corresponde a un industrial de alto rango, quien bajo la condición de anonimato habló con Reuters en la víspera al evento. Asimismo, desde la agencia informativa se hizo saber que fomentar la expansión de la clase media mexicana podría convertirse en un importante motor de crecimiento.
Revivir la economía.
Como parte de los planes del presidente López Obrador en lo que refiere a la economía se encentra reconstruir la economía de abajo hacia arriba mediante los planes de asistencia que poco a poco se propagan por todo el país, además de generar niveles de crecimiento del 4 por ciento, así como proteger la calificación crediticia de grado de inversión.
De tal modo que los jefes de las instituciones financieras han aprovechado la víspera de la convención para mostrar su aprobación a los planes de AMLO.
“El sistema financiero ha sido y continuará siendo un actor comprometido con México y su desarrollo, por lo que celebramos y acompañamos las medidas anunciadas (…) por parte del Gobierno de México”, precisó Marcos Martínez, jefe de la Asociación de Bancos de México (ABM), en declaraciones retomadas por Reuters.
Otro de los objetivos que tiene respaldar el proyecto de nación está enfocado en obtener recursos, y es que en una gestión en la que la austeridad será el eje de conducción, ser parte de los proyectos cobra relevancia, por lo que, el impulso a la inclusión financiera de la mano del sector privado en conjunto con el público ayudará al sector financiero a generar esfuerzos sin tanta inversión al tiempo que Andrés Manuel López Obrador se beneficiará al deshacer el daño causado a los empresarios por decisiones polémicas.
Si es que se logra revertir el escepticismo, las empresas invertirán, se mejorará el 50 por ciento de los inversores en el presidente y se avanzará en materia económica, en un aparente ganar ganar del que todo mundo quiere ser parte.