Tras la orden ejecutiva del presidente Donald Trump, que bloqueó el acceso a Estados Unidos a migrantes de Siria, Irán, Irak, Libia, Somalia, Yemen y Sudán, las marcas han reaccionado.
Hoy la cadena de cafeterías Starbucks anunció por medio de su máximo responsable, Howard Schultz, que contratará 10 mil refugiados a nivel mundial, durante los próximos cinco años, como respuesta a la prohibición de entrada de refugiados e inmigrantes de siete países.
Ayer Lyft dio a conocer una donación de un millón de dólares a la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU), una de las organizaciones que está peleando en los tribunales contra la medida del Presidente Trump.
Previamente Google, Apple, Facebook y Twitter hicieron lo propio; ahora Ford se suma al rechazo del veto, lo que sorprende, pues se trata de una empresa que respaldó al presidente Trump respecto a retirar inversiones en México, para trasladarlas a Estados Unidos.
Sin embargo, en esta ocasión la automotriz se muestra en contra, por medio de su consejero delegado, Mark Fields, y el presidente ejecutivo, Bill Ford.
En un comunicado respaldado por ambos directivos, se puede leer que:
El respeto por todas las personas es uno de los valores centrales de Ford Motor Company y estamos orgullosos de la rica diversidad de nuestra empresa. Es por eso que no apoyamos esta política ni ninguna otra que vaya en contra de los valores de nuestra compañía
Así, la empresa deja claro que apoya a la diversidad en el mundo, aún contra la medida tomada por el Primer Mandatario estadounidense.