Ford anunció este jueves que mantendrá su programa para reducir 10 mil millones de dólares en costos a pesar de los aranceles impuestos al acero y el aluminio por la administración de Donald Trump.

La automotriz estadounidense no ha cambiado sus objetivos y no ha incluido aumentos adicionales por estos productos, indicó Joe Hinrichs, presidente de operaciones globales de la firma.

“Nos estamos apegando a la cifra de 10 mil millones de dólares que dimos en diciembre”, indicó en una entrevista de prensa el ejecutivo de la automotriz.

Los analistas esperaban un alza de los precios del acero y el aluminio vendidos en Estados Unidos tras los aranceles de 25 por ciento y 10 por ciento, respectivamente, hasta que Donald Trump decidió imponer sobre la importación de estos materiales.

Al presentar sus resultados del 2017 en enero, Ford advirtió que el año actual podría ser difícil debido al aumento en el costo de las materias primas y las fluctuaciones negativas en los tipos de cambio.

La automotriz, presente en todos los continentes, gasta alrededor de 10 mil millones de dólares al año en la compra de materias primas, y el aluminio y el acero representan dos tercios de ese gasto.

Donald Trump hizo oficial el 8 de marzo la imposición de aranceles a las importaciones de acero y aluminio, luego de una semana de incertidumbre sobre la decisión si sus todavía socios México Y Canadá formarían parte del nuevo impuesto.

El gobierno estadounidense exentó a ambas naciones debido a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero aseguró que se cancelará ese beneficio si no se llega a un trato justo.

“Si no llegamos a un acuerdo, si no logramos renegociar el TLCAN, de un tratado justo, entonces daremos por terminado el tratado (…) Si sí lo renegociamos, no le impondremos estos aranceles a Canadá y México”, indicó Trump durante su mensaje en la Casa Blanca.