La Fórmula 1 encara la recta final de la temporada, las escuderías afinan sus estrategias para hacer frente al Gran Premio de Rusia, en el Autódromo de Sochi, y es precisamente en este país donde surge un problema más para el equipo Racing Point Force India.
Hace unas semanas te dimos a conocer que Lawrence Stroll, líder de un consorcio, que entre sus firmas se encuentran Tommy Hilfiger así como Michael Kors, que además, es padre del piloto de Williams, Lance Stroll, compró a la escudería en la que milita el piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez, misma que estuvo a punto de declararse en bancarrota.
Tras este evento, se registró una inconformidad por parte de una firma rusa de fertilizantes, la cual es controlada por Dmitry Mazepin, cuyo hijo es también piloto de carreras, de acuerdo con un informe de Bloomberg.
La compañía Uralkali PjSC presentó una demanda en Londres en contrade los administradores conjuntos del equipo, Geoffrey Rowley así como Jason Baker, de FRP Advisory. Según el medo, el mayor productor de potasa de Rusia señaló que su oferta por Force India recibió un trato perjudicial y desigual.
El equipo, que ya se encuentra en territorio ruso, fue contactado por Bloomberg para solicitar comentarios; la escudería señaló que no ha recibido una demanda del Tribunal Superior, pero indicaron que cualquier acción legal sería defendida vigorosamente, ya que cumplieron con sus deberes legales y la venta de Force India logró un resultado exitoso.
Por su parte, Uralkali indicó que su oferta, misma que incluyó un componente en efectivo de entre 133 millones de dólares, era superior a la oferta ganadora; el proceso de licitación no fue transparente, aseguró Paul Ostling, director senior independiente de Uralkali.
Herramienta de mercadotecnia.
Force India sería una herramienta de marketing valiosa, según Uralkali, que ya patrocina el Gran Premio de Rusia, y que además había sido auspiciador del equipo durante varios años. El gigante de fertilizantes vende sus productos en 20 países en los que la F1 realiza carreras.
A pesar de que el hijo de Mazepin, Nikita, era un piloto en desarrollo para Force India, y que actualmente ocupa el segundo lugar en el GP3, no era la motivación para la oferta de Uralkali, detalló Bloomberg.
“No se trata de Nikita”, indicó Ostling, “no tiene la licencia de F1 y puede llevarle dos años obtenerla. El deseo de Uralkali de comprar el equipo no tiene nada que ver con eso”.