-
Los anuncios para el Super Bowl generan el doble de engagement que un contenido normal
-
Contenidos relacionados con el partido, que son protagonizados por una celebridad eleva el ROI hasta en seis veces la inversión
-
Los fake followers afectan una campaña de marketing derivado de la incorrecta elección del influencer
A pesar de que el Super Bowl registró durante su edición 2018 una baja en la cantidad de telespectadores (103 millones) en relación a la edición anterior (111 millones), sigue siendo el espectáculo deportivo más importante del año en Estados Unidos así como en otras latitudes.
Ejemplo de lo anterior es que, según diversos sitios de prensa, CBS, la cadena dueña de los derechos de transmisión del partido del domingo entrante, ya comercializó el 90 por ciento de su oferta publicitaria, aunque a precios similares a los ofertados por NBC en el Super Bowl LII (5.3 millones de dólares por 30 segundos).
Asimismo, refiere Gerardo Sordo, CEO y fundador de BrandMe, el Super Bowl ayuda en demasía a las marcas a incrementar sus ventas, “un contenido que tenga relación con el Super Bowl genera el doble de engagement que un contenido normal”.
De igual forma, al momento de sumarse a la conversación en redes sociales incrementa hasta en 11 veces la interacción del cliente con la marca, mientras que la realización de contenidos relacionados con el Super Bowl y adicionar a una celebridad eleva el ROI de la campaña hasta en seis veces más de lo invertido.
Derivado de estos indicadores que nos demuestran el potencial que representa el encuentro por el campeonato de la NFL, las marcas se sienten atraídas a participar en mayor medida en el evento.
Sin embargo, existen diferentes riesgos o errores en el que las firmas puedan incurrir en su deseo de participar en el encuentro, uno de ellos es la incorrecta elección del influencer, ya sea porque no empata con los valores de la marca o del partido, o porque la personalidad elegida tiene un número falso de seguidores.
Sordo señaló al respecto que el 80 por ciento de las firmas que se publicitarán en el partido definitorio del futbol americano en Estados Unidos ejecutarán su estrategia alrededor de una celebridad, derivado de que ya saben emplear la campaña; en tanto, aquellas firmas pequeñas son las que están vulnerables a generar alianzas con falsos influencers.
“Muchas veces no son efectivas las campañas simplemente porque la búsqueda del influenciador no fue el correcto”, sostuvo el directivo.
Factores
Dentro de los principales factores para contratar de manera errónea a los influencers, indicó Gerardo Sordo, CEO y fundador de BrandMe son la falta de experiencia, la ausencia de recursos, es decir el incorrecto análisis del influencer aún cuando ya existen herramientas para medir el impacto real que tiene la personalidad en cuestión.
Asimismo, en ocasiones el tomador de decisiones se deja llevar por “números bonitos”, es decir la cantidad de seguidores con la finalidad de quedar bien al interior de una marca, lo que sería “asegurarse” de contratar a un influencer masivo.
No obstante, al no desmenuzar el número real de seguidores, es casi seguro que no se genere afinidad, lo que reduce el valor de la campaña así como su impacto con los usuarios.
Incluso se destacó que resulta sencillo saber si es que el influencer en cuestión cuente con una base de seguidores falsos es el origen de los mismos, ya que no es común que el grueso de los usuarios de un influencer mexicano se encuentren en la India, Rusia o Arabia Saudita.
De tal modo que para una marca, encontrar a la persona que lidere la campaña en un evento trascendental como es el Super Bowl debe ser parte de una estrategia elaborada con tiempo, para que permita la posibilidad de revisar a plenitud el impacto real de un influencer así como de sus valores y reputación.