La comprobación de datos se ha vuelto en últimas fechas, una excelente estrategia de contenidos gracias al acceso que se tiene a la Big Data.
El planteamiento que surge a partir de esta administración de datos nos ayuda a dibujar mapas, mediante los cuales podemos identificar hechos o ficciones.
Lo anterior fue posible de ver en las diversas estrategias de comprobación de datos que surgieron durante el Debate Presidencial de este domingo, en el que se suscitaron diversas pautas generadas a partir del factchecking.
Primero es relevante destacar el ejercicio de medios como Animal Político, El Financiero y Reforma, que encontraron en esta estrategia una oportunidad de comprobar datos revelados por los candidatos en pleno debate.
El Financiero
#FactChecking. No es posible comprobar que el PAN otorgó 200 MDP a damnificados por el sismo como aseguró @RicardoAnayaC durante el #DebateINE pic.twitter.com/TGvubR279O
— El Financiero TV (@ElFinancieroTv) 23 de abril de 2018
Reforma
#FactChecking La información sobre el crecimiento de la pobreza que dijo Andrés Manuel López Obrador en el debate es cierta. pic.twitter.com/S0f161Xuui
— REFORMACOM (@Reforma) 23 de abril de 2018
Segundo, los datos se han convertido en un importante activo, sobre todo para marcas de medios, sin embargo, su importancia radica en la capacidad con que cualquier entidad digital puede generar estrategias a partir de toda la información que se genera en redes sociales o plataformas online en las que interactúan.
Esto ha dado paso a la integración de fuentes de datos, pues a partir de esta variedad, las marcas logran establecer recursos que determinan el éxito de sus campañas o análisis que hacen del mercado.
Para dimensionar la importancia de aprender a interpretar datos, cifras de Wikibon explican que durante este 2018, el tamaño del mercado mundial de Big Data llegaría a los 40 mil 800 millones de dólares.