El próximo 25 de mayo se celebrará en Irlanda el referéndum para determinar si se legaliza el aborto, lo que ha llevado a las gigantes tecnológicas Google y Facebook a tomar medidas para evitar injerencias desde otros países a través de los anuncios que pudieran publicar.

Es por ello que Google ha prohibido durante esta últimas dos semanas de campaña, la aparición de propaganda tanto a favor y como en contra de la legalización del aborto en los anuncios de sus resultados de búsqueda, al igual que sucede en YouTube.

Tal como se reseña en The Guardian un vocero de Google, la decisión se ha tomado para evitar que desde fuera de Irlanda, distintas organizaciones “aprovechen las lagunas en las leyes de financiamiento de campaña para persuadir a los votantes antes del día de la votación”.

Así mismo, ha señalado que, “Tras nuestra actualización sobre los esfuerzos de integridad electoral a nivel mundial, hemos decidido detener todos los anuncios relacionados con el referéndum irlandés sobre la octava enmienda”.

En el caso de Facebook, una decisión similar ha sido tomada para que comience a regir desde esta semana. De esta forma, la propaganda que se permite es sólo aquella que proviene de organizaciones irlandesas, bloqueando de forma automática los anuncios procedentes del extranjero.

El Gobierno irlandés aprobó formalmente en marzo de este año, el proyecto de ley para llevar a cabo este referéndum con el que se pretende derogar la Octava Enmienda, en la cuál queda reconocido el derecho a la vida tanto de la madre como del bebé en gestación.

La enmienda, que fue aprobada por votación popular en 1983, de ser derogada permitiría al gobierno -tal como ha señalado- introducir una legislación que legalice el aborto sin restricciones en las primeras 12 semanas de embarazo.

En la actualidad, se considera ilegal en Irlanda, la práctica del aborto excepto en casos en los que la salud de la madre corra peligro.