Aún con la fuerte crisis de imagen que Facebook ha vivido durante los últimos años, la red social de Mark Zuckerberg se mantiene como uno de los grandes aliados para la publicidad a nivel mundial.
Durante el primer trimestre del año y con respecto al mismo periodo de 2018, la plataforma registró un crecimiento de 26 por ciento en los ingresos generados por publicidad, lo que significó una suma neta de 14 mil 912 millones de dólares.
Publicidad más cara…
Esto sucede aún cuando los costos publicitarios dentro de la que todavía se considera como la principal red social a nivel mundial, se han elevado de manera importante ante un descenso en el tiempo que los usuarios destinan a navegar dentro de dicho servicio.
Durante abril del año pasado, desde AdStage, indicaban que el tiempo que los usuarios destinaban a navegar en Facebook se habría reducido 18 por ciento. Para ser específicos, la pérdida de tiempo destinado por usuario a la plataforma habría sido de 24 por ciento. Con este escenario de antesala se estimaba que el precio del CPM en Facebook se habría incrementado 122 por ciento en comparación con el costo registrado a principios de 2017.
Estas cifras coincidieron con el más reciente gran cambio en el algoritmo de Facebook, mismo que habría provocado que el precio promedio de un anuncio en la red social se elevara hasta 43 por ciento, cifra potencialmente mayor al 4 por ciento de incremento que registró el número de impresiones atribuidas a cada ejecución de esa naturaleza.
…y menos visible
Luego de este escenario, Facebook acaba de anunciar nuevos cambios para los anuncios dentro de su plataforma; el formato de estos contenidos se verá impactado de manera importante.
En concreto, Facebook ha anunciado la reducción de texto en los espacios publicitarios con la intención de que el contenido de las marcas se adapte a la página de inicio de su versión móvil, misma que desde principios de años, funciona bajo un nuevo diseño.
De esta manera, desde ahora, la plataforma sólo permitirá anuncios con un máximo de tres líneas de texto, a partir de las cuales el usuario deberá dar clic para conocer más sobre el mensaje de la marca.
Adicional a esto, y a partir de ahora, la red social sólo permitirá anuncios en formato vertical con una escala máxima de 4:5. La nueva norma se aplicará tanto para las imágenes que no estén acompañadas de enlaces como para los videos.
Es importante mencionar que aquellos anuncios que no cumplan con ambas normas simplemente no se mostrarán en la página de inicio de la red social.
Los pros y los contras
Estas modificaciones tienen un objetivo fundamental: la red social intenta que los anuncios se adapten a su nuevo diseño para que adopten estos contenidos sean compatibles tanto con la página principal de Facebook como en el feed de Instagram.
Para las anunciantes, esto dibuja una serie de pros y contras. Por un lado, el cambio podría resultar práctico para los anunciantes al tener que trabajar un solo formato de anuncio para dos de las principales redes sociales.
Desde la óptica de Facebook, también resulta en un acierto ya que el movimiento aumenta su potencial como compañía multiplataforma.
No obstante, también es cierto que se trata de un cambio que retará de manera importante la creatividad estratégica de las empresas. El dicho “más con menos” tendrá que ser llevado a la práctica y los equipos creativos deberán buscar la manera de conquistar la atención -cada vez escasa- de las audiencias con menos apoyos visuales, menos texto y con anuncios mucho más discretos.