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Sin la salida de Reino Unido de la UE, los ciudadanos del bloque votarán para decidir 751 puestos políticos
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De acuerdo con Statista, la mitad de los usuarios de Facebook jamás discuten temas políticos en la red
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Por el contrario, siete por ciento afirman que este tópico es frecuente en sus interacciones dentro de la plataforma
En 2017, Sprout Social calculó cómo se distribuía la población de las redes sociales a lo largo de todas las generaciones. Millennials, Gen Xers, Baby boomers mostraron preferencia por una u otra plataforma. Pero un dato salió a reducir: Facebook es el servicio preferido de prácticamente todo el mundo, sin importar su edad. Con semejante poder, la compañía de Mark Zuckerberg también tiene en sus hombros una importante responsabilidad sociopolítica.
De acuerdo con Mashable, la red social reforzará sus medidas publicitarias. En específico, se quiere poner requisitos más estrictos para todo anunciante político que quiera poner mensajes a ciudadanos europeos durante las próximas semanas. Facebook apuntó que estas medidas se emplearán para proteger la integridad de las elecciones en la Unión Europea (UE). La región elegirá a sus nuevos representantes dentro del Parlamento durante una votación en mayo.
Richard Allan, vicepresidente de soluciones de política global en Facebook, apuntó que cada anunciante debe ganar un permiso especial para cada país. Los grupos necesitan proveer a la red social documentos para validar su identidad. Asimismo, se buscará corroborar la locación de las organizaciones interesadas. También reconoció que el sistema no será infalible, pero que esperan que se convierta “en una barrera real” para agentes extranjeros maliciosos.
¿Otro desastre electoral en el futuro de Facebook?
A raíz de la interferencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016, Facebook y demás redes sociales han estado bajo asedio. En Canadá, fueron amenazadas con nuevas leyes electorales federales. Twitter, también por las votaciones en la UE de mayo, ha comenzado a establecer herramientas para reducir el impacto de la interferencia extranjera. Por casi tres años, el tema ha sido un constante dolor de cabeza para todos los agentes de la industria.
No es la primera vez que Facebook implementa límites para sus anunciantes políticos. Hace un año, Mark Zuckerberg prometió que se establecerían filtros similares para comerciales en México, Brasil, India, Pakistán y Estados Unidos. Sin embargo, las medidas probaron ser insuficientes en ese momento. No solo se tardaron meses en identificar agentes maliciosos. Además, algunas organizaciones apuntaron que la situación empeoró con respecto a 2016.
La única diferencia sería que, con las elecciones de la UE, el reto de Facebook es mucho mayor. Debido a las características de la región, una agencia puede establecer operaciones en un país del continente y colocar comerciales políticos en otros. Así pues, la red social debe monitorear, por semanas y simultáneamente, comerciales en 28 países con 24 idiomas. Por supuesto, el reto de la tecnológica va más allá de las consecuencias inmediatas del proyecto.
A finales de marzo, la UE aprobó una legislación para compañías tecnológicas. La Copyright Directive manda que Facebook, Google, Twitter y otras plataformas deben vigilar activamente que sus usuarios no violen los derechos de autor. Cualquier falla las deja abiertas a una multa directa. Esta regulación podría servir como precedente para controles más estrictos en publicidad. Particularmente si Zuckerberg falla en proteger la integridad de las elecciones.