Facebook y la privacidad de sus redes sociales son todo un tema de escrutinio desde hace varios años, sobretodo de WhatsApp, el servicio de mensajería que adquirió en 2014, y el cual anteriormente señaló que estaba cifrado de extremo a extremo, por lo que ni el propio Faebook podía espiarte.
Fue en 2018 cuando en una audiencia en el senado, Mark Zuckerberg aseguró que “no vemos ningún contenido en WhatsApp, está completamente encriptado”. Se debe añadir que, dentro de las políticas de privacidad viene una en la que se señala “ No podemos leer ni escuchar sus conversaciones personales , ya que están encriptadas de un extremo a otro. [el énfasis es de ellos] Esto nunca cambiará “, ¿pero qué tan cierto es esto? Parece que nada.
Facebook te espia
Un nuevo informe de ProPublica sobre el sistema de moderación de contenido de WhatsApp indica que aunque Facebook ha dicho en más de una ocasión que WhatsApp es una plataforma orientada a la privacidad, lo cierto es que los mensajes de su chat pueden ser leídos por un tercero.
Lo anterior sin duda es un golpe para la imagen de una empresa que presume de un “cifrado de extremo a extremo”, el cual solo le permitiría al destinatario y al remitente ver los mensajes al poseer los tokens digitales pertinentes.
No obstante, ProPublica aseguró que al menos mil moderadores empleados por la firma contratista de moderadores de Facebook, Accenture, se encargan de revisar el contenido de los usuarios que ha sido marcado por su sistema de aprendizaje automático. Estos se encargan de supervisar temas como el spam, desinformación, incitación al odio, posibles amenazas terroristas, material de abuso sexual infantil (CSAM), chantaje y “negocios de orientación sexual”.
Aunque en algunos casos, como el CSAM, quizá el regular las imágenes de mejor forma dentro de las redes sociales no es mal requerimiento, pero el problema es que WhatsApp no solo se queda con esa información, sino que el conocimiento sobre el usuario puede ser inmenso.
WhatsApp revela, en sus términos de servicio , que cuando se informa una cuenta, “recibe los mensajes más recientes” del grupo o usuario denunciado, así como “información sobre sus interacciones recientes con el usuario denunciado”. Esto puede incluir también las cuentas vinculadas de Facebook e Instagram, su dirección IP y la identificación del teléfono móvil, a pesar de a configuración de su telén¡ono.
La colección de mensajes contradice la gran audiencia de WhatsApp que se mostró a principios de este año en una demanda contra el gobierno indio. Luchando contra una nueva ley que probablemente habría permitido a los agentes del orden de la India rastrear los mensajes de los sospechosos, la compañía dijo en un comunicado compartido con Reuters:
Requerir que las aplicaciones de mensajería ‘rastreen’ los chats es el equivalente a pedirnos que mantengamos una huella digital de cada mensaje enviado en WhatsApp, lo que rompería el cifrado de extremo a extremo y socavaría fundamentalmente el derecho a la privacidad de las personas.
Pero, al igual que Facebook, WhatsApp parece entusiasmado por compartir metadatos con las fuerzas del orden de EE. UU., Incluidos los datos que han ayudado a proteger al gobierno de la responsabilidad. En un caso contra un denunciante del Departamento del Tesoro que compartió documentos clasificados con BuzzFeed, los fiscales presentaron el hecho de que Natalie Edwards había intercambiado docenas de mensajes con un reportero en el momento de la publicación. Edwards ahora enfrenta una sentencia de prisión de seis meses.
¿Por qué lo hace?
Hoy en día los datos de los usuarios digitales son un tesoro para decenas de empresas, sin embargo, WhatsApp también puede optar por no almacenar la información, tal como lo hace Signal, donde existe una función de metadatos que recopila son su información de contacto.
Facebook le dijo a Gizmodo que WhatsApp puede leer mensajes porque se consideran una versión de mensajería directa entre la empresa y el reportero lo que, bajó su pensamiento) la colección de Facebook de ese material no entra en conflicto con el cifrado de extremo a extremo.
Si bien la noticia no ha salido a ser desmentida, lo cierto es que el jugar con la privacidad de los usuarios digitales es sin duda un problema para Facebook, simples que ha tenido uno que otro tropiezo el problema es que las modificaciones y exigüidad del público.
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