Una de las peores crisis de credibilidad y filtración de datos se vivió recientemente de la mano de Facebook y Cambridge Analytica, en donde más de 87 millones de usuarios vieron comprometida su información.
El caso fue un parteaguas para dimensionar la relevancia de los datos personales que se otorgan a internet.
La crisis de marca fue importante para Facebook, tanto que Mark Zuckerberg tuvo que comparecer ante el Congreso de Estados Unidos para dar su versión y está a toda marcha para limpiar la reputación de la red social.
El caso es tremendamente complicado y al parecer lo es mucho más para Cambridge Analytica que para la plataforma social, pues hoy anunció su quiebra.
Julian Wheatland, CEO de SCL Group (la empresa matriz), reveló a los empleados su cierre, de acuerdo con The Wall Street Journal.
Sabemos que la reputación de marca impacta directamente a los recursos económicos de una compañía. El 80 por ciento del valor de las compañías tiene que ver con la reputación y otros medios intangibles, según Llorente & Cuenca.
Así, parece lógico que Facebook busque medios para generar recursos económicos. De acuerdo con Bloomberg, la opción que se está estudiando es la de lanzar una versión premium, en la que el usuario pagaría por su privacidad y para evitar la publicidad.
La agencia de noticias dice que Facebook está realizando investigaciones de mercado para saber si este nuevo modelo permitiría a la red social atraer a nuevos usuarios. El supuesto cobro por suscripción cubriría las ganancias por publicidad. En 2017, Facebook obtuvo ganancias de 41 mil millones de dólares por este segmento.
La plataforma no ha confirmado ni negado el supuesto, pero recordemos que recientemente, Mark Zuckerberg dijo que:
“Siempre habrá una versión de Facebook que será gratuita. Es nuestra misión el tratar de ayudar a todos a conectarse en el mundo y de acercar a todos. Para ello, creemos que necesitamos ofrecer una versión que todo el mundo pueda adquirir”
Aunque también enfatizó que los anuncios dirigidos conforman el modelo de negocios de Facebook, y que si dejan de dirigir anuncios, tendrían que encontrar otra forma de monetización.