Pese a que el 94 por ciento de la población afirme que es perjudicial la forma en la que la publicidad muestra a la mujer como objeto sexual, según estudios de She Knows, este tipo de practicas aún persisten dentro de la industria a manos de marcas que relacionen dichas acciones con el consumo de sus productos.
La publicidad sexista está quedando en el pasado gracias a determinaciones realizadas en la industria publicitaria, sin embargo, esta transición es lenta y se realiza por pasos, por lo que aún se puede ver que ciertas firmas comerciales continúan implementando a la mujer como objeto sexual y con menos derechos y oportunidades.
Incluso este hecho llega a afectar las ventas de las marcas, pues estudios realizados por The Gandalf Group y proyectados por Statista revelan que la publicidad sexista disminuye la cantidad de compras, ya que el 38 por ciento de los encuestados asegura ser menos propenso a adquirir productos de la marca que incorporan este tipo de mensajes.
Asimismo, el 29 por ciento revela que, ante un anuncio sexista, piensa de forma detenida la posibilidad de adquirir la mercancía en donde también se puede llegar a considerar los beneficios de la compra y marcas similares. Al igual, se revela que un 27 por ciento de los encuestados revela que la publicidad de este tipo no impacta en sus decisiones en el punto de venta.
Por su parte, la minoría –el dos por ciento– señala que los mensajes en donde la mujer no es tratada de forma equitativa podrían impulsar las compras de determinado producto, mientras que el uno por ciento revela que en definitiva si compraría la mercancía que se anuncia.
Vale destacar que organizaciones como el Círculo Uruguayo de la Publicidad, en compañía de ONU Mujeres elaboran el “Decálogo de buenas prácticas para una comunicación publicitaria no sexista” en donde a través de 10 puntos de plantean los movimientos a seguir como tomar partido por una publicidad responsable, identificar mensajes que incurran en el tema y dejarlo atrás como un recurso creativo, no promover estereotipos, dejar de implementar formas de opresión, no promover modelos inalcanzables y evitar difundir mensajes de esta índole.
Aunado al tema, estudios de la organización She Knows señalan que el 52 por ciento de las personas que contempla en su estudio afirmó que ha comprado un producto que muestra a las mujeres de mejor manera en anuncios publicitarios.