Un reciente estudio ha dado a conocer cómo es que ha ido evolucionando la esperanza de vida en varias partes del mundo.
Al día de hoy, en México, se registran oficialmente poco más de siete millones de casos positivos de Covid-19 desde el inicio de la emergencia sanitaria, mientras que poco más de 330 mil personas han fallecido a causa de la enfermedad.
Por otro lado, son más de 630 millones de casos positivos y unos seis millones y medio de fallecimientos los que se registran a nivel global desde que se dio a conocer el primer enfermo de Covid-19.
Ahora bien, en la actualidad, todo indica que una parte considerable de la gente ha aprendido de lo sucedido con la Covid-19; sin embargo, eso no es indicador de que, en caso de otra pandemia, haya una mayor confianza en las autoridades respecto a un buen manejo de la misma.
Dicha encuesta dio a conocer que en países como Luxemburgo e Irlanda, existe una mejor opinión y confianza de las estrategias de atención médica de su gobierno, con un 69 por ciento y un 60 por ciento, respectivamente, diciendo que pensaban que sus líderes estarían listos.
En México, menos del 50 por ciento de los encuestados respondió con desconfianza sobre las estrategias en sus gobiernos ante una posible nueva pandemia.
La evolución de la esperanza de vida
¿A qué viene todo eso? Sucede que, con la llegada del Covid-19, entre otros casos más, la esperanza de vida a nivel mundial se ha visto afectada de manera considerable.
Y es que, de acuerdo con un estudio realizado por el Banco Mundial y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), desde 1960 hasta 2020, la esperanza de vida al nacer ha aumentado unos 20 años en algunas regiones.
Al día de hoy, el país con la esperanza de vida más alta del mundo es Japón, con una media de casi 85 años para todos los sexos; le sigue España con algo más de 82 años.
En contraparte, en Latinoamérica, sí se ha visto reducida, tal como lo señala la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Por mencionar un ejemplo, en Brasil, la esperanza de vida es de 76 años.
Ahora bien, Latinoamérica no es la única región que maneja una media baja, pues, derivado del reciente conflicto entre Rusia y Ucrania, los rusos cuentan con una esperanza de vida de 72 años.