Una comunicación efectiva requiere de práctica, y no solamente es aprender de memoria lo que debes decir, sino también conectar con tu audiencia a través de gestos y movimientos para enfatizar tus palabras y, sobre todo, teniendo ideas claras de lo que quieres transmitir.
Ya sea que tengas una presentación, estés frente a un cliente o hablando con un nuevo prospecto, hacer preguntas es una gran herramienta para recopilar información sobre las necesidades y deseos de quien te escucha, y con ello ofrecer una solución útil.
Sin duda, todos sabemos que desde pequeños se nos enseña a hacer preguntas; sin embargo, en ocasiones la forma de elaborarlas puede ser confusa, poco clara y termina obstaculizando la comunicación, además de restarte profesionalismo.
Por ello, te comparto los 6 errores más comunes al hacer preguntas para que evites hacerlos:
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Hacer preguntas compuestas: este tipo de cuestionamientos son aquellos donde realizas varias preguntas a la vez; con ello, quien te escuche podría perderse y responder solamente a lo último que recuerda. Haz preguntas claras y concisas.
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Evitar escuchar al otro: en ocasiones, por seguir un guion que tienes preestablecido dejas de lado lo que la otra persona te quiere decir. Practica también la escucha activa.
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Vaciar tu opinión al cuestionar: al hacer esto, la información que obtengas se verá sesgada y, en ocasiones, las personas pueden dejar de prestarte atención si están en desacuerdo contigo. Procura ser neutral al realizar tus preguntas.
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Ignorar cuándo utilizar preguntas abiertas o cerradas: si deseas conocer la opinión del otro e identificar qué es lo que necesita, elige preguntas abiertas; en cambio, si necesitas mayormente datos exactos, puedes optar por las cerradas.
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Utilizar un lenguaje complejo: cuando estés redactando tus preguntas, piensa en quién es tu audiencia y usa un lenguaje acorde a ella. Evita tecnicismos y mejor busca un lenguaje tan sencillo que cualquier persona lo pueda entender.
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No dar tiempo para que las personas contesten: si realizarás varias preguntas, brinda el tiempo necesario para que el otro piense y responda a tus cuestionamientos. De lo contrario, tus preguntas podrían no tener el impacto que deseas.
Si identificaste que cometes alguno de estos 6 errores, tienes una oportunidad de mejora. Date el tiempo necesario para replantear tus palabras y ten una comunicación más efectiva que te acerque a tus objetivos. Recuerda que tu branding personal se construye día a día.
