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Según la UE, hay 700 millones de dispositivos ‘durmiendo’ en los hogares de los europeos
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En el proceso de recuperación y reventa se podrían generar 43.500 puestos de trabajo
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Representan unos US$ 1.100 millones en potencia en materias primas de alto valor
El reciclaje de los teléfonos móviles es uno de los grandes e impensados negocios de las primeras décadas de este siglo.
Nadie lo imaginó antes de la era de los smartphones, pero su geométrico crecimiento también tiene su correlato en su frecuente reemplazo, lo que hace que cientos de miles sean desechados mensualmente, generando toneladas de basura electrónica.
Un informe de la misma Unión Europea estima que esos teléfonos podrían traer muchos beneficios al escenario manufactero. Básicamente, tres:
- ahorrar miles de millones de dólares en costos de fabricación,
- ser una fuente de creación de empleo
- y reducir las emisiones de CO2.
En números, el estudio publicado por Business Insider dice que se podrían aprovechar para ahorrar más de US$ 1.100 millones, reducir 2 millones de toneladas de emisiones de CO2 y crear más de 43.500 puestos de trabajo.
“Son los móviles que, según el estudio de la UE, están ‘hibernando’. Están en desuso, pero sus propietarios no se deshacen de ellos por miedo a perder datos confidenciales o por si pudieran volver a necesitarlos. La investigación estima que hay unos 700 millones de este tipo de dispositivos ‘durmiendo’ en los hogares de los europeos”, dice BI.
La investigación explica que si esos teléfonos circularan en el mercado, se podrían crear más de 43 mil empleos entre tareas de reciclaje, reacondicionamiento y reventa. Dice que allí, la Unión Europea podría encontrar una muy buena oportunidad.
En 2017, la comercialización de smartphones de segunda mano llegó a 140 millones de dispositivos, un enorme aumento interanual del 13%.
Para la investigación, la clave está en “retener” en el Viejo Continente a los teléfonos sin uso para reacondicionarlos y revenderlos dentro de la UE, ya que en la actualidad, siete de cada 10 aparatos que se recogen en el mundo desarrollado se vuelven a vender en países en vías de desarrollo.
Accede al estudio completo de la Unión Europea: “Identifying the impact of the circular economy on the fast-moving consumer goods industry”.
Hay que recordar que Europa es el continente que más basura tecnológica genera: 16,6 kilogramos por persona.
El informe estima que, si se llevaran al máximo las tasas de reciclaje de los teléfonos vendidos en 2017, podrían volver a fabricarse con los materiales recuperados hasta el 59% de dispositivos, publica el BI.
Un dato más que interesante: en el caso que se pudieran reciclar todos los smartphones que están en desuso en Europa, se podrían recuperar, atención: ¡14.920 toneladas de oro, plata, cobre, paladio, cobalto y litio!
Eso es unos US$ 1.100 millones en materias primas.
Si no se reutilizan, son un problema. El PNUMA -Programa para el Medio Ambiente de las Naciones Unidas- calcula que se generan en todo el mundo cerca de 50 millones de toneladas de aparatos electrónicos que son desechados anualmente.
Un informe de Naciones Unidas de 2015 que analizaba el volumen de residuos electrónicos por habitante, reveló que Chile estaba en el primer lugar de los latinoamericanos, seguido de Uruguay y México. Estados Unidos y China, los más “sucios” del mundo.