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Agentes como Apple y Amazon ya llevan un tiempo trabajando en el desarrollo de sus propios chips
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Estas marcas, junto con Microsoft ahora, argumentan que crear sus propios componentes les permite aumentar la eficiencia de sus sistemas
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Lo anterior, por el simple hecho que pueden diseñar estos elementos para que se adapten perfectamente a la tarea en cuestión
De nuevo parece que Apple está inspirando a sus rivales a tomar decisiones de negocio que podrían revolucionar la industria. De acuerdo con Reuters, Microsoft comenzó a trabajar en el desarrollo de sus propios chips. La idea es que empiece a generar estos componentes para su uso en su red de servidores para su unidad de cloud computing. También podría integrarlos en su línea de computadoras personales Surface, y potencialmente otros dispositivos en el futuro.
Las noticias fueron dadas a conocer primero por Bloomberg. El medio citó a dos individuos que están relacionados con los planes dentro de Microsoft. La idea es empezar a depender menos de los componentes que provee Intel, la compañía que ahora le da soporte al 90 por ciento de los centros de datos en Estados Unidos (EEUU). Es seguro que la tecnológica va a usar los chips, basados en el diseño ARM, para mejorar el rendimiento de sus data-centers.
Según estas fuentes internas dentro de Microsoft, se está explorando la posibilidad de usar los nuevos chips en su línea de productos Surface. Sin embargo, no es una opción tan segura como el desarrollo de componentes para los centros de datos de la tecnológica. Incluso si se llegara a consolidar este proyecto en su unidad de PCs, el cambio solo afectaría a una parte del catálogo en el corto plazo. Las acciones de Intel cayeron 6.3 por ciento, según Bloomberg.
Un movimiento brillante de parte de Microsoft
Este reporte es bastante positivo para la tecnológica, considerando la semana que ha tenido. De acuerdo con Business Insider, Microsoft se ha visto involucrada en el mega-hackeo del gobierno de Rusia que afectó a decenas de agencias públicas en EEUU. En su momento se reportó que las afectaciones habrían podido vulnerar a clientes y usuarios de la tecnológica. La marca aceptó que fue golpeada por el incidente, pero no halló evidencia de daños a terceros.
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Más allá de la situación general de Microsoft en los últimos días, se debe de reconocer que la decisión es bastante prudente. De acuerdo con el Wall Street Journal, el principal proveedor de chips en la región, Intel, se ha empezado a encontrar con barreras importantes. En concreto el hecho que ya no podrá encargarse personalmente con la manufactura de los componentes. Lo anterior podría implicar menor calidad, algo que por supuesto no gustaría a sus clientes.
Pero hay otra poderosa razón por la que esta decisión es interesante. Al controlar esta parte de su cadena de suministro, Microsoft puede tener un mayor control sobre la calidad final de los servicios y productos que le da a sus clientes. De acuerdo con The Street, es crucial para crear economías de escala y reducir la dependencia en los proveedores externos. No solo eso, sino que incluso le podría permitir ofrecer precios bajos al cliente, o bien aumentar márgenes.
Mal momento para la industria de los chips
Al tiempo que Microsoft celebra esta decisión, la industria de componentes está en un punto no muy agradable. Y es que no es la primer tecnológica en tomar una decisión similar. Apple ya está produciendo sus propias laptops y móviles con chips propios. Esto no solo le da la confianza incluso de apuntar a mercados como el de gaming. También podría reducir de forma significativa los ingresos de líderes como Intel, Nvidia, AMD y otros productores similares.
A eso se debe sumar que la industria de chips, en general, no está viviendo el mejor momento de su vida. Desde hace un tiempo que varios expertos de la industria están advirtiendo de una escasez global de estos componentes. No solo podría llevar a que Microsoft no pueda crear más y mejores centros de datos. Miles de tecnológicas serían incapaces de cumplir con la demanda de smartphones, laptops, Smart TV y hasta coches en los primeros meses de 2021.