Las apps más famosas del mercado se han vuelto cada vez más complejas respecto a las funciones que incorporaban de un principio, esto es algo común que puede relacionarse a distintos factores, como el feedback de los consumidores o la aparición de nuevas necesidades en el mercado que es necesario cubrir para evitar que los usuarios migren a otras apps.
Por ello, empresas como Facebook se han preocupado por dominar el sector de las apps de mensajería, una categoría de las más utilizadas e importantes para las personas, por lo que ha invertido en la compra de WhatsApp y en el desarrollo de su app llamada Messenger.
En el caso de Messenger y Facebook, las apps están por convertirse en algo más que apps de mensajería, con la incorporación en el pasado de funciones como videollamadas, intercambio de archivos y ahora también con la visión de convertir ambas apps en toda una plataforma de desarrollo independiente, donde terceros puedan implementar servicios, como por ejemplo, la publicidad, algo que resulta lógico tomando en cuenta que en días recientes WhatsApp eliminó el pago anual por el servicio.
A su vez, otras plataformas también han buscado hacerse un camino propio en cuestión de mensajería, por ejemplo, en el caso de Firefox, se optó por un servicio que permitiera a los usuarios de este navegador web comunicarse por medio de mensajes escritos con base en el intercambio de códigos de usuario.
Asimismo, el uso de plataformas de mensajes no almacenados en servidores también ha cobrado relevancia, demostrando que a los usuarios les importa la privacidad de sus conversaciones. En el caso de Snapchat, esto también ha significado una plataforma para que anunciantes creen canales de comunicación directa con los usuarios de las apps de mensajería.
En conclusión, dentro de las apps de mensajería que más utilizamos poco a poco llegarán nuevos modelos de negocio basados en la implementación de servicios de terceros.