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La labor de ser creativo se ha vuelto crítica en el mercado, sobre todo en un momento en que se debe de apostar por alternativas cada vez más audaces.
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El papel del creativo se ha detonado cada vez más en función de tareas que no tienen desperdicio, por el contrario, nos recuerdan la capacidad de una marca de ser diferente.
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Hoy en día se abordan tareas cada vez más determinantes a entender el consumo.
La creatividad es una de las actividades críticas hoy en día y un detonador indispensable en el entendimiento del consumidor y la proyección de una marca.
La audacia con la que cuenta la creatividad es determinada en todo momento por la capacidad con que se ha logrado consolidar en el mercado y lo hace con una estrategia muy clara, que es la de entender al consumidor y hacerlo con objetivo.
Cuando se tiene esta claridad, un elemento de gran ayuda en esta labor es la que tiene que ver con la manera como las marcas destacan en el mercado y lo que es aún más audaz, la forma en que logran innovar frente al consumidor.
Dentro de LAS 21 CLAVES DE LA CREATIVIDAD, Bibiana Ballbè nos revela los que considera como las principales características del concepto de creatividad y advierte con respuestas contundentes de dónde proviene, cómo se detona, qué caminos nos hace tomar, cuál es su impacto económico y a que debe su importancia.
Ser creativo, fundamental en el mercado
La labor de ser creativo se ha vuelto crítica en el mercado, sobre todo en un momento en que se debe de apostar por alternativas cada vez más audaces ante el consumidor, en donde las marcas terminan por comprender el camino que deben seguir en su labor creativa.
Hay indudablemente tareas que no podemos perder de vista y estas son sin lugar a dudas las que identifican las fortalezas de una marca y su influencia en el mercado.
Indudablemente se establecen grandes referentes con estos ejercicio, pero lo que resulta crítico hoy en día es lo que tiene que ver con la capacidad de las marcas de poder entender el mercado.
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