La comunicación es más crítica que nunca por la pandemia que estamos viviendo, donde tenemos que relacionarnos mediante canales a los que antes no estábamos acostumbrados.

Sin lugar a dudas la labor de comunicar ha tenido que enfrentarse a nuevos retos y entre estos nuevos desafíos, un elemento común en todos estos es la necesidad de una estructura.

Partiendo de una estructura se logra patentar el labor de una marca y con ello detonar mejores actividades, pensadas en la gestión de talento cuando se trata de personas y en las ventas, cuando se trata de uno de los tantos objetivos comerciales en los que se piensa y que se buscan con mayor intensidad, sobre todo por la pandemia de COVID-19 que estamos viviendo.

En El arte de comunicar (Desarrollo personal) de Leo Farache, el autor considerada que las palabras correctamente empleadas pueden ser la base de una nueva sociedad, cuyo principal error ha sido la incomunicación.

El poder construir una habilidad para comunicar es un tema de sensibilidad, inteligencia y empatía, razón que argumenta que de la utilización de la comunicación depende nuestra relación con los demás.

Dentro de la bra muestra las claves para convertir a la comunicación en una aliada que nos ayuda a cambiar nuestras vidas, ya que trabaja en el origen de nuestros problemas que es la incomunicación.