No es secreto que las mujeres tiene un peso de suma importancia en términos económicos y de consumo.
Hablamos de un segmento que con el paso del tiempo ha ganado cada vez más fuerza en estos sectores y que ahora, para las marcas, se han convertido en una prioridad para crecer en cualquier sociedad.
PAra darnos una idea, de acuerdo con información de la Encuesta Intercensal INEGI 2015, 29 por ciento del total de los hogares en nuestro país es dirigido por una mujer y esta proporción creció 4 puntos porcentuales entre 2010 y 2015.
Entre las madres más jóvenes, 4 de cada 10 mamás millennial cuentan con una actividad económica que les genera ingreso y aportan entre el 31 por ciento y el 60 por ciento del ingreso de sus familias, de acuerdo con datos de LEXIA.
Las marcas que lo logran
Lo cierto es que en medio de lo que muchos han llamado una “revolución femenina” no todas las marcas han logrado conectar de manera adecuad con este target que es quizás uno de los que más ha evolucionado en términos de interés y necesidades en los últimos años.
Los ejemplos sobre las marcas que han errado en la manera en la que conectan con las mujeres son diversos y no distinguen de categorías.
No obstante, existen algunas otras que han conseguido entender las exigencias de este grupo de manera especialmente atinada.
Cuando menos así lo revela estudio “What Women Want” realizado por Kantar, el cual ha encontrado cuáles son las 10 marcas que han conseguido posicionarse como verdaderas aliadas de la mujer mexicana.
Esta investigación revela que las marcas que respetan la equidad de género en su comunicación, logran detonar mayor impacto emocional que se traduce en una conexión con la marca. A mayor percepción de equidad de género en un anuncio se incrementa el amor por la marca, el disfrute y emociones positivas.
De manera puntual, la investigación encontró que para el 81 por ciento de los mexicanos, las marcas de alimentos y bebidas son promotoras de la igualdad, mientras que en segundo lugar se encuentran las marcas de moda y tecnología con un 73 por ciento, seguido de las marcas de bancos con un punto de diferencia 72 por ciento, en cuanto que las marcas de belleza se encuentran en cuarta posición con un 66 por ciento, y en las últimas posiciones están las marcas de automóviles, 60 por ciento y las de cerveza con un 56 por ciento.
Con esto en mente, tenemos que las marcas más cercanas a las mujeres mexicanas son:
Todos preocupados
Ante estas cifras es justo mencionar que el consumidor es especialmente sensible a este tema; la defensa de los derechos de las mujeres, su integridad y la igualdad de género se ha convertido en uno de los puntos ejes de su conversación.
Este fenómeno ha tenido especial impacto en las ejecuciones de comunicación comercial que desde hace varios años apuestan por un uso mucho más mesurado de la imagen femenina dentro de sus discursos publicitarios.
La exigencia por parte de las audiencias es clara. El 94 por ciento de las mujeres afirma que usar a la mujer en la publicidad como un “sex-symbol” es dañino para su género con lo que 71 por ciento admite que las firmas comerciales deberían ser más responsables en la forma que utilizan su publicidad para promover mensajes positivos referentes a dicho género, según un estudio realizado por She Knows. De hecho la misma fuente refiere que más de la mitad de las mujeres afirman adquirir productos de ciertas marcas luego de que estas firmas representan de manera positiva la imagen femenina, cifra que contrasta con el 25 por ciento de consumidoras que compran marcas o productos aún cuando la comunicación de los mismos ‘atenta’ contra la dignidad femenina.
El reclamo no se limita a las audiencias de género femenino. Una investigación de Havas Media a nivel mundial, indica que 5 de cada 10 mujeres así como 4 de cada 10 hombres resienten de la forma en que las mujeres se representan en la publicidad, mientras que para ambos géneros esta percepción alcanza un 31 por ciento cuando de la imagen masculina hablamos. De hecho, el 48 por ciento de las mujeres y el 44 por ciento de los hombres considera que los comerciales de televisión muestran demasiados estereotipos de género anticuados.