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En Estados Unidos, es más exitoso emprender en el área de salud y servicios sociales
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La mayoría de las personas que crean nuevos negocios tienen estudios medios-superiores
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Otro segmento importante solo cuentan con preparación universitaria
Una de las actividades más difíciles de llevar a cabo es emprender. No solo las personas tienen que aprender a lidiar con problemas de dinero solo con creatividad. Asimismo, requiere de un nivel de preparación que no todos pueden asegurar tener. Eso sin contar, por supuesto, que hay quienes creen estar trabajando en un proyecto innovador y solo pierden su tiempo.
De todas formas, emprender es popular. Según SmallBizGenius, 62 por ciento de los adultos creen que es una buena carrera. Finances Online, por su lado, dice que solo 18 por ciento de los negocios tienen el chance de triunfar en su primer intento. Hay varios factores que pueden provocar este fracaso, pero Homely identifica uno crucial: elegir a los partners incorrectos.
Emprender con el partner despilfarrador
Algo tiene que quedar muy en claro del entorno de los nuevos negocios: es muy difícil que una empresa arranque en números negros. Es evidente que en la extensa mayoría de los casos, las personas deban enfrentar los primeros meses con pérdidas importantes. Sin embargo, esto no es excusa para actuar como si existiera una fuente ilimitada de dinero con el cual emprender.
Por eso no hay nada peor para un nuevo negocio que el partner que gasta en exceso. Hay socios que creen que, para emprender, hay que empezar gastando como los grandes de la industria. No solo esto puede causar una importante y peligrosa falta de liquidez. Además, puede dar una imagen negativa ante el resto de los colaboradores y, peor aún, los clientes.
Tener un partner quejoso
La retroalimentación siempre es muy importante al emprender. En especial cuando se tiene un negocio que está creciendo y tiene que mejorar constantemente para sobrevivir. Así pues, es muy importante que todos los socios expresen sus opiniones sobre el desarrollo de la marca. Incluso (y especialmente) cuando se trata de críticas duras sobre el rendimiento y resultados.
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Pero esto no significa que los socios critiquen y lloren por cada altibajo y desafío que se presenta. Emprender es un trabajo duro, que requiere enfrentar una serie de constantes retos a veces imposibles de predecir. Solamente reclamar sin proponer soluciones no solo no ayuda a salir adelante. También termina por transmitir negatividad a todo el resto del equipo de trabajo.
Soportar el emprender con un partner envidioso
Hay una regla simple a seguir si se quiere que un negocio tenga éxito. Se debe de trabajar en equipo. Cualquier otra estrategia provocará que los conflictos y roces internos, en el mejor de los casos, retrasen el éxito de la compañía. En el peor de los casos, puede causar que la idea simple y sencillamente se desmorone sobre sí misma, sin chance de volver a emprender.
Generalmente éste es el desenlace cuando se tiene a un partner envidioso. No solo está más interesado en el éxito personal que en realmente emprender y salir adelante. Además, no soporta cuando otros co-fundadores tienen más protagonismo en sus respectivas áreas. Por supuesto, si no son el CEO, suelen rebelarse contra el director general de forma constante.
Conseguir un partner flojo
De nuevo, emprender es una actividad exigente, que requiere muchas más horas de esfuerzo, dedicación y sacrificio de lo que exigiría un trabajo regular. En este sentido, los socios tienen que estar conscientes que, como parte del equipo de fundadores, tienen que estar dispuestos a dar lo que se necesita de ellos. Por supuesto, y por desgracia, no todos tienen esto en claro.
Un partner flojo es quien cree que, solo por poner su dinero, ya hizo su parte. Si bien hay perfiles de este tipo, se llaman inversionistas y no socios fundadores. En este sentido, es crucial que todas las personas que estén en el mismo bote quieran trabajar al unísono. Si no es así, hay que aceptar las consecuencias de su menor compromiso con el nuevo negocio.