La reciente presentación del estudio “Marketing Strategy & Media Investment 2024-2025” por parte de IAB México es un recordatorio contundente de que la publicidad digital no sólo es el presente, sino también el futuro del marketing. Sin embargo, más allá de los números y las tendencias, este informe nos plantea una pregunta fundamental: ¿estamos preparados para los desafíos que trae consigo este entorno en constante transformación?
La digitalización y las regulaciones de privacidad han remodelado cómo las marcas abordan sus inversiones. Según el estudio, para 2025 se espera que la inversión en medios digitales crezca hasta 57%, mientras que los medios offline caerán a 43%. Si bien estas cifras reflejan una evolución natural hacia lo digital, también subrayan la importancia de mantener un equilibrio entre estrategias tradicionales y digitales. La televisión abierta, por ejemplo, conserva una parte significativa de la inversión offline (32%), lo que demuestra que no todo lo tradicional está destinado a desaparecer.
Uno de los hallazgos más interesantes del informe es la diversificación de las plataformas sociales. Aunque Facebook e Instagram lideran la inversión, TikTok está ganando terreno rápidamente con un crecimiento proyectado de entre 15% y 18% para 2025. Esta tendencia refleja un cambio en cómo las marcas buscan conectar con audiencias más jóvenes y segmentadas.
Ejemplos sobran: Bimbo ha destacado por integrar datos propios en su estrategia digital, logrando una mayor personalización en sus campañas publicitarias, mientras que Cinépolis ha utilizado la inteligencia artificial para optimizar la experiencia del cliente en sus plataformas, consolidando su liderazgo en el sector. ¿Pero están las empresas realmente maximizando el potencial de estas plataformas o simplemente siguen el tren de la moda digital?
Otro aspecto clave es la creciente adopción de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA) y el Advertising Video On Demand. Con una adopción esperada de 70% y 61% respectivamente para 2025, estas herramientas se están convirtiendo en pilares del marketing moderno. Sin embargo, no podemos ignorar el desafío que representa su implementación efectiva. Automatizar procesos y personalizar experiencias es fundamental, pero ¿cuántas marcas están preparadas para manejar los costos y la complejidad de estas tecnologías?
El informe también destaca un cambio significativo hacia el uso de datos propios (First Party Data), que se prevé crezcan en 8% para 2025, mientras que los datos de terceros (Third Party Data) continúan en declive. Este giro responde a las regulaciones de privacidad y también a la necesidad de construir relaciones más directas y personalizadas con los consumidores. Sin embargo, depender exclusivamente de datos propios podría limitar la capacidad de las marcas para expandir su alcance. ¿Están las empresas equilibrando adecuadamente la privacidad con la eficacia de sus estrategias?
A mí parecer, uno de los mayores retos sigue siendo la medición del retorno de inversión (ROI). Con 60% de anunciantes señalándolo como el principal obstáculo, queda claro que aún hay un largo camino por recorrer en la optimización y medición de las estrategias
digitales. Esto nos lleva a reflexionar: ¿está el marketing digital avanzando más rápido de lo que las marcas pueden seguirle el paso?
El estudio de IAB México no sólo ofrece un panorama de las tendencias actuales, sino que también deja entrever los retos y las oportunidades que marcarán el futuro de la publicidad digital. Las marcas tienen en sus manos el poder de transformar la manera en que conectan con sus audiencias, pero para lograrlo necesitan adoptar un enfoque más estratégico, innovador y, sobre todo, centrado en el cliente. El 2025 está a la vuelta de la esquina. ¿Estamos listos para enfrentarlo?