Internacional.- Si existe un país (dentro de los 32 participantes en el Mundial de Brasil 2014) donde la popularidad del futbol se ha incrementado de manera importante en las últimas dos décadas, éste es sin lugar a dudas Estados Unidos, nación que desde la realización de la Copa del Mundo (1994) no sólo ha logrado crecer el nivel futbolístico de su liga, sino también el valor de sus equipos y el interés en su conjunto nacional.
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No cabe duda alguna de que los estadounidenses saben como hacer marketing, y desde que organizaron el Mundial hace 20 años han hecho un gran trabajo con su liga, la cual de acuerdo con un estudio realizado por ESPN recientemente alcanzó niveles de popularidad similares a los del beisbol.
Entre las acciones de marketing adoptadas por los estadounidenses que han permitido crecer la popularidad del balompié dentro de la Unión Americana se encuentra no únicamente el importar jugadores de clase mundial como Thierry Henry, David Beckham o David Villa, sino también exportar jugadores como Clint Dempsey, Tim Howard o DaMarcus Beasley, entre muchos otros; además de permitir que clubes como el Manchester United, Chelsea, Milan, Real Madrid o Barcelona hagan sus partidos de pretemporada en los Estados Unidos.
Pero esta creciente popularidad del balompié en los Estados Unidos no es perceptible únicamente entre los aficionados al futbol dentro de dicha nación, sino incluso dentro de la población en general, pues encuestas realizadas por The Celebrity DBI indican que jugadores como David Beckham son identificados por el 89 por ciento de los estadounidenses, mientras que Pelé es reconocido por el 51 por ciento de éstos.
Sin lugar a dudas los vecinos del norte están haciendo bien las cosas para incrementar de forma bastante acelerada el marketing y la popularidad de un deporte que esta tarde hará su debut en Brasil 2014 ante Ghana y que hasta hace algunos años parecía destinado al fracaso en un mercado dominado por el futbol americano, el basquetbol, el beisbol e incluso el hockey.
