Estados Unidos levantó formalmente este viernes las restricciones de exportación a los proveedores del grupo chino ZTE, de acuerdo con un informe del Departamento de Comercio.
El gobierno estadounidense aclaró que seguirá monitoreando a la compañía para evitar posibles violaciones de las sanciones de Estados Unidos contra Irán y Corea del Norte.
“El departamento permanecerá vigilante mientras monitoreemos de cerca las acciones de ZTE para garantizar el cumplimiento de todas las leyes y regulaciones de Estados Unidos”, indicó en un comunicado el secretario de comercio, Wilbur Ross.
Pero la decisión de revertir las duras sanciones a la compañía, fruto de la insistencia del presidente estadounidense Donald Trump, no ha sido del agrado del Congreso estadounidense.
Los legisladores de ese país tomaron medidas para mantener la prohibición y acusó a Trump de recompensar a una compañía que ha incumplido reiteradamente las leyes estadounidenses, le ha mentido a las autoridades y se ha involucrado en espionaje.
El Departamento de Comercio prohibió en abril a las empresas estadounidenses que suministraran a ZTE componentes cruciales, forzando a la firma china a detener sus operaciones, luego de que los funcionarios concluyeran que la compañía mintió repetidamente y violó las sanciones de Estados Unidos.
Pero como un favor al presidente chino, Xi Jinping, Trump le ordenó aliviar las sanciones contra ZTE.
En un acuerdo alcanzado el mes pasado, Washington acordó levantar la prohibición de exportación si ZTE pagaba una multa adicional de mil millones de dólares, aparte de la multa de 892 millones impuesta en marzo del año pasado.
La compañía también debía reemplazar su junta directiva y depositar 400 millones de dólares en custodia para cubrir futuras infracciones, un paso final que tomó esta semana.