Mediante un mensaje emitido desde sus redes sociales, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, anunció nuevas mediadas preventivas para evitar la propagación del coronavirus en dicha entidad.
Del misma manera que sucedió en la Ciudad de México durante el fin de semana pasado, desde ahora se mantendrán cerrados los centros comerciales, bares, centros nocturnos, comercios no prioritarios, deportivos y teatros, además de guarderías , bibliotecas, casas del adulto mayor, gimnasios, salones de fiesta y tiendas departamentales.Estas mediadas deberán de ponerse en práctica desde hoy hasta nuevo aviso.
Del Mazo afirmó que los restaurantes podrían seguir funcionando en la modalidad de entrega en el local y a domicilio.
De esta forma, el gobernador pidió que los ciudadanos permanezcan el mayor tiempo posible dentro de sus hogares al mismo tiempo que limiten sus salidas a las compras de productos de primera necesidad para permitir a los cuerpos de seguridad atender emergencias médicas.
Anuncio nuevas medidas preventivas para evitar la propagación de #Covid_19mx. pic.twitter.com/FJw8NT4IDN
— Alfredo Del Mazo (@alfredodelmazo) March 23, 2020
Es importante enconar que al cierre del día de ayer, la Secretaría de Salud del Estado de México informó que 35 personas en la entidad habrían dado positivo al COVID-19, al tiempo que 42 casos se mantienen como sospechas y 144 pruebas han resultado negativas.
Hasta el momento, en el dicho estado, los supermercado seguirán operado de la misma manera que la red de transporte público.
El freno al sector comercial
Cabe mencionar que hace apenas seis días, el mandatario habría decretado la suspensión de eventos masivos así como trabajos coordinados con el sector empresarial y sindicatos para facilitar el trabajo en casa y apoyar a madres de familia que deberán de cuidar de sus hijos ante la suspensión de clases.
Las medidas tomadas por el gobierno estatal representarán pérdidas importantes para el la economía del estado así como para la economía nacional.
Este impacto podría ser aún mayor que el ocasionado por la pandemia ed Influenza H1N1, misma que hace poco más de una década paralizó la actividad comercial por un lapso de entre 10 y 20 días.
En aquel momento, y para esa crisis en particular, la Secretaría de Salud informaba que el cierre temporal de cines, centros comerciales, restaurantes y cadenas de retail, habría generado pérdidas económicas por 40 mil millones de pesos.
Si se tiene en mente lo sucedido en aquel momento, existen claros ganadores. Mientras queda claro que las cadenas de cine perderán de manera importante, las cadenas de supermercados se verán especialmente beneficiadas.
Recordemos que durante la contingencia de salud de 2009, las ventas totales de los supermercados ascendieron a 71 mil 100 millones de pesos hasta mayo de aquel año, lo que significó un aumento de año con año de 18.5 por ciento, según datos entregados en aquel momento por la Asociación de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (Antad).