Internacional.- Facebook, se ha convertido en la red social más poderosa en todo el mundo, tal y como se puede ver de datos publicados por el portal web Statista y que se reflejan en esta gráfica elaborada por el mismo portal web, ya que se puede ver que el número de usuarios activos diarios en la red social creada por Mark Zuckerberg llega a los 1.038 millones, una cifra muy superior a los poco más de 300 millones de usuarios diarios activos que tenía Facebook en 2011.
Así que no es de extrañar que la red social de Mark Zuckerberg se haya convertido en una de las principales plataformas en las que las marcas quieren estar presentes para promocionar sus productos y así llegar al mayor número de consumidores posible.
Esto es lo que le ha pasado a una firma de galletas alemana, Leibniz Butterkeks, que, en estos momentos, está celebrando su 125 aniversario y que el pasado 12 de abril subió un clip a Facebook que ha logrado enternecer a los usuarios de la red social y ha logrado conseguir más de 9 millones de clics.
En el comercial, se puede comprobar cómo los tópicos nos persiguen desde que somos pequeños: balones para niños y muñecas para niñas; rosa para niñas y azul para niños. Y los que Leibniz quiere demostrar en su spot es que los estereotipos deben ser algo a olvidar y que nos debe importar bien poco lo que el resto opine de nosotros.
El spot, comienza con un niño que camina hacia la parada de autobús y en sus manos lleva una muñeca. El pequeño es feliz junto a su juguete y cuando llega a su destino, el niño parece que ya no está tan feliz, ya que en la parada de autobús hay varios compañeros de él que se burlan de él, aunque al pequeño que tiene su muñeca no le importa lo que piensen de él. El día siguiente, la situación empeora y se puede ver al protagonista con una maleta de la que sobresale un tutú rosa y sus compañeros se vuelven a burlar de él y le quitan el vestido.
Pero, aunque parezca que el niño es quien disfruta con estas cosas de niña, lo cierto es que el pequeño acude, cada mañana a la parada para ir a ver a su hermana al hospital, que es bailarina y se ha roto una pierna, y todos los días le lleva una cosa para que se sienta feliz.
Y tú, ¿te dejas llevar por las apariencias?