Actualmente las compañías de cigarros utilizan imágenes en sus productos como fotografías de bebés enfermos o personas que han sido sometidas a traqueotomías, pulmones dañados y más,
esto con el objetivo de crear consciencia en los consumidores creando una una campaña de prevención. Asociaciones gubernamentales aseguran que gracias a éstas medidas, el consumo de tabaco ha disminuido a nivel global.
En esta ocasión, Jodi Charles fue la consumidora que encontró en una cajetilla de cigarros la imagen de su padre, David Ross quien murió a causa de problemas asociados con los huesos y de un linfoma que desarrolló en sus últimos años de vida. Jodi acusa a la empresa Super Kings que nadie pidió su autorización o consentimiento para que ésta fuera divulgada en el producto.
Ante esta situación, Charles se dirigió al hospital en donde su padre paso los últimos 10 meses, en donde descubrió que la imagen se filtro a través de las redes del recinto. Sin embargo, ellos negaron esta situación.
El problema se hizo mayor para Jodi Charles, cuando la Comisión Europea declaró que no era David Ross y que cualquier similitud entre el hombre de la fotografía y su padre, eran simplemente coincidencias.