La crisis sanitaria ha tenido un fuerte impacto en la economía de las familias mexicanas, que al paso de los meses vieron con como las afectaciones a sus finanzas cobraban mayor intensidad y sus hábitos de consumo se fueron transformando, entre ellos surgió una poderosa razón por la que el cliente le puede decir sí a una marca, o no.
Los factores promedio por los que el consumidor compra se concentran en los segmentos que necesita en mayor medida, en este sentido los sectores que más consumen los mexicanos en e-commerce están encabezados por el Vestir, con 90 por ciento comprando alguna prenda de vestir en línea, siendo las blusas, camisas y pantalones los productos más populares, seguidos de la ropa deportiva. En cuanto al calzado, las zapatillas urbanas y zapatos formales, así como las botas y botines son los más populares en e-commerce.
También por el sector infantil, con más del 80 por ciento de los usuarios comprando, por lo menos una vez, algún tipo de artículo infantil, ya sean juguetes, muñecos, centros de juegos o peluches, aunque también escogieron carriolas y sillas para comer.
En un tercer punto entra la tecnología, con el 60 por ciento ha adquirido productos tecnológicos en línea, destacando las compras de smartphones, smart TV, y laptops. Esto para el trabajo, la escuela y el entretenimiento, necesidades que surgen en medio del confinamiento y se han extendido.
Y finalmente, también se ha convertido en indispensable el hogar. Casi el 60 por ciento también adquirió artículos del hogar como colchones, ropa de cama y ollas. Todo lo que resulta indispensable para vivir.
Fuera de estos segmentos se complican las ventas, ante el presupuesto reducido del consumidor, pero también porque a parecer de este, algunas marcas no consiguen hacer match con la razón por la que le dicen sí a una marca, que de acuerdo con la consultora EY, es un precio más bajo.
Un análisis de la firma señala que el 44 por ciento de los consumidores mexicanos eligió por comprar marcas mas baratas, al tiempo que el 55 por ciento se mantuvo con la misma marca, o compró una mas cara, y solo el 1 por ciento dejó de comprar productos.
Esto es reflejo de que el 91 por ciento de los mexicanos vieron un impacto negativo en sus ingresos, al tiempo que el 58 por ciento de los consumidores mexicanos vieron una reducción en sus ingresos, de al menos el 60 por ciento.
La economía de las familias es lo que resulta el motivo principal para decirle sí a una nueva marca, el que les oferte un precio más bajo que apoye a su economía.
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