Para nadie es un secreto que en la actualidad, los smartphones son una extensión casi natural para la mayoría de las personas. Dispositivos como el iPhone, se han convertido en una herramienta vital para cumplir con las necesidades y objetivos del día a día.
Algunas cifras dejan en claro el problema. Un estudio elaborado por Motorola indica que el 53 por ciento de los millenials consideran al smartphone como su mejor amigo, mientras que 49 por ciento admitía que miraba su smartphone con más frecuencia de la que debería, y un 44 por ciento aseguraba que se sentían prácticamente obligados a hacerlo. De hecho, el 65 por ciento reconoció entrar en pánico cuando pensaban en que podían perder su teléfono
Esta dependencia se ha convertido en un verdadero problema de salid en más de un mercado alrededor del mundo. En este sentido, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Corea, la adicción al teléfono móvil e internet puede causar desequilibrios químicos cerebrales en jóvenes usuarios que generan más trastornos como la depresión o el insomnio.
La función que Tim Cook desactiva
El problema no sólo es una preocupación para las universidades y el sector salud. Los grande líderes de las grandes empresas detrás de estos dispositivos móviles también son conscientes de este problema.
Así lo demuestra Tim Cook, CEO Apple, directivo que en un evento organizado por la revista TIME, reconoció que la adicción a los smartphones es un problema serio, al tiempo que compartió su “secreto” para no verse afectado por tan complejo mal.
Durante su participación, Cook reconoció que para Apple nunca ha sido un objetivo lograr que las personas estén utilizando de manera constante el móvil. Sin embargo, según un estudio elaborado por Dscout, descubrió que los usuarios de iPhones tocan la pantalla un promedio de 2 mil 617 veces al día.
Aunque con el iOS 12, Apple lanzó la opción “tempo de uso” para permitir a los usuarios administrar el tiempo que utilizan navegando en diversas aplicaciones, lo cierto es que esto no parece ser suficiente e incluso, el líder de la empresa de Cupertino confesó desactivar una función en su iPhone personal para no ser parte de tan escandalosa cifra.
Son útiles, pero con medida
De esta manera, el CEO confesó que, desde hace algunos meses, optó por desactivar la función de notificaciones en su móvil personal, al tiempo que invitó a la audiencia a hacer lo mismo.
“Me pregunté a mi mismo si realmente necesitaba recibir tantísimas alertas y llegué a la conclusión de que era algo que no aportaba valor a mi vida o que no me hacía mejor persona. Así que decidí cortar por lo sano. De hecho, se lo recomiendo a todo el mundo”, afirmó el CEO, al tiempo que detalló “cada vez que tomas el iPhone apartas la vista de algo que estás haciendo o de alguien con quien estás hablando, ¿verdad? Si estás mirando más tu móvil que a los ojos de otra persona, hay algo que no estás haciendo bien”.
La postura de Cook refleja una realidad que debe ser leída sobre todo por las generaciones más jóvenes con especial urgencia.
Si bien, como lo menciona un estudio realizado por Wiko, un 61 por ciento de los usuarios asegura que las nuevas tecnologías son útiles cuando se trata de mejorar la calidad de vida, mientras se haga con mesura e inteligencia, también es una realidad que esta condición se pierde cuando los dispositivos son utilizados en exceso. El equilibrio debe ser la norma y las marcas están obligadas a orientar al consumidor para, por un lado, ayudarlo a entender con responsabilidad esta realidad digital, y, por otro, facilitar la competencia por la atención de las audiencias.