Buenos Aires, Argentina.- La Justicia local condenó a una comerciante por haber usado más de un millón de pesos que le depositaron por error en su cuenta bancaria. Vio una oportunidad, la aprovechó y la descubrieron. Igual, ganó una fortuna.
Mucho hemos hablado en este espacio sobre una de las claves de los buenos emprendedores: saber aprovechar las oportunidades de negocios. No es fácil verlas, pero allí están, a la espera de gente con voluntad y creatividad a la hora de invertir.
Sin embargo, todo tiene un límite. Un ejemplo de esto ocurrió en Buenos Aires, cuando una mujer de 49 años, dueña de un lavadero de automóviles, descubrió que el banco le había depositado por error 1,2 millón de pesos argentinos (en ese momento, 184 mil dólares) en su cuenta.
La historia comenzó así: el lavadero de la mujer se encargaba de la limpieza de las ambulancias de la compañía de medicina privada Swiss Medical. Según se desprende de la causa, el 6 de enero de 2014, la oficina encargada del pago a proveedores le transfirió, por error, la suma de 1.210.454 a su cuenta, que en ese momento representaban US$ 184 mil.
Cuando advirtieron la confusión, ya era tarde. En solo tres días, “la mujer realizó extracciones de su cuenta por cajero automático, libró cheques –que después cobraba ella misma– y realizó otros movimientos bancarios hasta utilizar la totalidad del dinero”, publicó La Voz.
Swiss Medical hizo la denuncia por “apropiación indebida de cosa ajena habida por error”, un delito previsto en el artículo 175 del Código Penal, que prevé una multa que a valores actuales asciende entre 1.000 y 15.000 pesos, mucho menos que el 1,2 millón que la mujer logró ¿robar?
La causa iba a juicio, pero la defensa pidió pagar la multa. La Fiscalía lo consideró y pidió el máximo. Finalmente, se acordó la realización de un juicio abreviado, donde la imputada acordó abonar una multa de 14.000 pesos.
No es bueno para las marcas
Para el lavadero de autos no será un gran problema, sin embargo, para Swiss Medical Group, el hecho de que se conociera la falta de suficientes controles puede ser una complicación.
Es que si fue posible una transferencia errónea de tal cantidad de dinero, también se podrían esperar otro tipo de descuidos… y tratándose de una empresa dedicada a la salud, no es una buena imagen de marca.
Demasiado “inteligentes”
En Argentina, en los últimos tiempos, abunda este tipo de creatividad mal entendida. Como lo contáramos en Merca2.0, un hombre de 29 años conoció el mundo volando gratis cuatro años gracias a una estafa por Internet.
En efecto, hizo más de 30 viajes usando números de tarjetas de otros. Cuando la aerolínea denunció la maniobra, ya lo había hecho hasta pasajero frecuente.