Un reporte de Europair, bróker aéreo, ha encontrado que en España, sólo sobreviven 21 por ciento de las empresas de transporte aéreo que se establecen, después de investigar a 835 aerolíneas. Sólo el 21 por ciento de las compañías de transporte aéreo creadas en nuestro país ha logrado sobrevivir.
Según los datos del estudio, en 90 año, son 63 las líneas aéreas que ha dejado de funcionar, mientras que la media de vida de este tipo de empresas se calcula en apenas ocho años. Aunque si se observa la media de las aerolíneas creadas durante la década de los ochenta, esta cifra baja a 6 años y es de 3 años para las que han sido creadas a partir de 2006. Tan sólo en España, durante la pasada década, 33 empresas de transporte aéreo, especialmente las dedicadas a realizar vuelos chárter, han suspendido sus operaciones.
Entre las razones para esta tendencia, se encuentra en los últimos años, la crisis económica de 2008, aunque también cuenta la falta de capacidad, por parte de las administraciones y regulaciones, para detectar los problemas y tomar las medidas necesarias a tiempo.
De las 80 aerolíneas que se han creado en España, apenas 17 se mantienen operativas, mientras que para muchos quedan en el recuerdo, empresas que desaparecieron en los últimos años, como Air Comet (2009), Clickair (2009) y Spanair (2012).
En el otro extremo, las que mayor vida han tenido son Iberia, nacida en 1927, seguida de Naysa (Navegación y Servicios Aéreos Canarios) nacida en 1969 y Air Europa y Swiftair ambas creadas en 1984.
Esta tendencia no es exclusiva de las líneas aéreas española, pues en países como Italia, Bélgica, Grecia y Suecia se repite un patrón similar, mientras que en el caso de las empresas de transporte aéreo de Alemania, Francia y el Reino Unido, Irlanda, Suiza, Austria y Polonia, destacan por su índice de supervivencia, ubicado entre el 34 y el 40 por ciento. Aunque para vencedores en este apartado, Portugal, que se lleva la corona en cuanto a duración de sus compañías aéreas, con un 58 por ciento de empresas establecidas que han sobrevivido desde su nacimiento.
Entre los problemas que suele traer consigo la desaparición de las líneas aéreas, además de la disminución de la oferta, para los consumidores, se encuentran los problemas derivados de las reservas realizadas con mucha antelación, como es habitual en este medio de transporte.