El sector de la inteligencia artificial promete crecimientos sostenidos durante el futuro inmediato. De acuerdo con cifras entregadas por el mercado mundial de la inteligencia artificial seguirá una tasa de crecimiento anual promedio cercana de 53 por ciento hasta 2021, con lo que se espera que este año alcance una facturación calculada en 4 mil 310 millones de dólares.

Sobre esta misma línea, tan sólo en el sector empresarial se prevé que valor de mercado de las aplicaciones de inteligencia artificial crecerá entre 2015 y 2024 a un ritmo anual de 56 por ciento, con lo que en pesos y centavos su valoración pasará de 202 millones a 11 mil millones de dólares.

Las cifras responden al interés de un gran numero de empresas por mejorar sus niveles de productividad y rentabilidad utilizando estas herramientas, mismas que a decir de diversos estudios pueden marcar la diferencia entre ser competitivo y perder presencia en el mercado durante los siguientes años.

De hecho previsiones entregadas por diversas fuentes indican que este año, 2018, marcará el inicio de la masificación en el uso de estos recursos en donde las organizaciones que sean capaces de adaptar con mayor rapidez estos avances saldrán victoriosas.

Desde Gartner refieren que durante este año, el 45 por ciento de las compañías de más rápido crecimiento tendrán más máquinas inteligentes que empleados.

La premisa también es confirmada por, firma que en su último informe Digital Trends indica que las empresas que manejan inteligencia artificial poseen 50 por ciento más de probabilidades de superar sus propias metas de negocio, lo que impulsará al 46 por ciento de las marcas a adoptar esta tecnología para finales de año.

Si bien estas cifras hablan de lo importante, también es cierto que cuando menos para aquellas tareas que tengan que ver con el consumidor final, el usuario dictará mucho el avance que se pueda tener en términos de adopción y uso rentable de estas tecnologías, que si bien cada ve son más accesibles, aún carecen de acciones de evangelización que incrementen su uso.

Por ejemplo, en marzo pasado indicaba que sólo 10 por ciento de los hogares poseen soluciones conectadas para el hogar, mientras que los hallazgos del Chatbot Report 2017, detallan que para será hasta 2019, cuando el 25 por ciento de los hogares en economías desarrolladas contarán con interfaces de asistente digital. De hecho se preve que únicamente 1 de cada 3 consumidores ha utilizado un chatbot, uno de las herramientas de automatización e inteligencia artificial más básicas.

Entre 2016 y 2025, según pronósticos de Tractica, los ingresos mundiales generados en el mercado de aplicaciones relacionados com inteligencia artificial crecerá de 357.89 millones a 7,714.17 millones de dólares.

La lenta adopción por parte de los consumidores de este tipo de tecnologías hace que, cuando menos en la última parte de la cadena de valor, las inversiones en inteligencia artificial resulten aún poco rentables.

Por tanto, para las marcas será vital pensar que antes que grandes soluciones automatizadas o habilitadas con sistemas de aprendizaje automatizado, los consumidores demanda productos, marcas y servicios que sean útiles para solucionar sus necesidades tanto funcionales como emocionales y aspiracionales.

Cumplir dicho objetivo encuentra en este tipo de tecnologías a un gran aliado; no obstante estas oportunidades deben manejarse con cautela y ser cuidadas a detalle. Es muy probable que sean pocas las marcas que en realidad consigan cubrir este objetivo.