• Como Uber, Didi también tiene operaciones en logística, entrega de alimentos y scooters eléctricas, no solo taxis compartidos

• La compañía también cuenta con apoyo de gigantes como SoftBank, Alibaba y Tencent

• Sin embargo, al contrario de su rival estadounidense, la plataforma china sí sería rentable en su unidad de viajes

Poco a poco se acerca más el día en que Didi oficialmente se vuelva una empresa pública. Sin embargo, en lo que llega la fecha decisiva, la tecnológica china ha ido revelando algunos datos interesantes sobre su negocio. De acuerdo con Reuters, la marca reveló exactamente cómo se distribuye la tarifa que cobra a los usuarios por cada uno de sus viajes. En promedio, el año pasado, el 3.1 por ciento de cada uno de sus pasajes se usa para alimentar sus ganancias.

Sus conductores, por otro lado, recibieron en promedio el 79.1 por ciento de las tarifas que se le cobraron a los consumidores. Esto significa que alrededor del 17 por ciento se aplica para cubrir gastos operativos, como mantenimiento, sueldos de empleados dentro de su negocio y proyectos de investigación. Los datos fueron dados a conocer por la misma Didi a través de su  cuenta oficial de WeChat. Es la primera vez que revela estos datos para el periodo de 2020.

Junto con esta información, Didi reveló que está planeando ajustar su estrategia de precios. Esto, luego de solicitar y compilar las opiniones de sus conductores. Es incierto cuáles serán exactamente estos cambios o cómo podrían afectar directamente a los consumidores. Que las estimaciones sean un promedio sugiere que estas tasas varían de caso a caso. Para 2022, dijo la marca el año pasado, piensa tener más de 800 millones de usuarios activos a escala global.

¿Qué conductores reciben más?

La información de Didi es interesante, considerando que los servicios de taxis compartidos por lo general no transparentan exactamente su algoritmo de cobro. En 2019, de acuerdo con el San Francisco Chronicle, Uber parecía quedarse con alrededor del 30 por ciento promedio de cada trayecto. La cifra está por encima del poco más del 20 por ciento que su rival china dice que cobró por cada viaje en 2020 (contando su porcentaje de ganancias y el de otros gastos).

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Aunque podría no ser una diferencia particularmente grande, sí es relevante para los mercados en donde Uber y Didi se enfrentan. Y es que la remuneración de los conductores ha sido un reto consistente para toda la industria de taxis compartidos. Desde hace años, como recuerda el Washington Post, muchos de estos socios han exigido a las apps mejorar sus condiciones de trabajo y pago. Con la COVID-19 y su golpe a la demanda de viajes, la crisis empeoró más.

Y en la recuperación post-pandemia, será crucial para Didi demostrar que sus conductores reciben más dinero por el trabajo que realizan para ella. Según agentes como WXYZ, muchos de los socios que estas apps tenían previo a la crisis sanitaria no han regresado, algo que ha llevado a que muchos pasajeros no reciban servicio. Lo anterior de hecho ha motivado a que Uber y Lyft anuncien incentivos temporales para que estos operadores vuelvan a la plataforma.

El camino de Didi a su IPO

La información de cómo divide sus tarifas, como ya se mencionó, tiene mucho que ver con las intenciones de Didi de salir a la bolsa. Ya desde mediados de marzo que se empezaron a dar rumores sobre el debut de la plataforma china al mercado de valores. Éstos tomaron aún más fuerza en abril, cuando se reveló que supuestamente iba a presentar sus papeles a Nueva York de forma privada. Pero fecha de la Oferta Pública Inicial (IPO) todavía no ha sido revelada.

Sea como sea, hay un claro entusiasmo ante la llegada de Didi a la bolsa, a pesar del terrible precedente que sentaron sus rivales Lyft y Uber. Y es que parece que la app china ha estado haciendo las cosas mejor en su expansión global que sus rivales. Por ejemplo, a mediados de abril se dio a conocer que había firmado un acuerdo con Volvo. La idea es que la automotriz le ayude a esta plataforma de taxis compartidos a crear una nueva flota de vehículos autónomos.