El Black Friday es una de las temporadas más importantes de consumo en mercados como Estados Unidos y aunque para Amazon se trata de una temporada que no se acerca a las ventas que genera durante su Prime Day.
Durante el tercer trimestre del año pasado, Amazon indicó que las ventas generadas por el Prime Day superaron a lo generado por el Black Friday y el Cyber Monday’ en conjunto con más de 175 millones de productos vendidos en a penas 48 horas.
El crecimiento del Black Friday
Aún con esta nota de antesala, lo cierto es que el “viernes negro” es una oportunidad que Amazon debe aprovechar para hacer crecer aún más sus arcas.
La premisa toma mayor sentido si consideramos que el Black Friday comienza a tomar alcances mundiales con millones de dólares en medio.
En principio es justo reconocer que hablamos de un esfuerzo promocional que cada vez se torna más digital.
Tan solo en año pasado en Estados Unidos, estimaciones entregadas en el 2019 Holiday Shopping Trends de Adobe, indicaban que las ventas online habrían generado un valor de 400 millones de dólares, lo que suponía una cifra 20 por ciento mayor que lo registrado durante la edición de 2018.
Esta condición que cada vez es más digital, ha permitido que las ofertas características de esta iniciativa lleguen a más mercados, en donde el mexicano es uno de ellos.
De esta manera, por ejemplo, el año pasado alrededor del Black Friday El se registraron ventas por 1,2 millones de dólares, más de 137 mil transacciones y un promedio de 137 mil compradores en la jornada. Para este año se espera un incremento de transacciones del 45 por ciento, un incremento en ventas del 70 por ciento y un promedio de 175 mil compradores en la jornada, con respecto a 2019, de acuerdo con un análisis de PayU.
Llaman a boicot contra Amazon
Con estas cifras de contexto, queda claro que el Black Friday es una oportunidad que Amazon no puede dejar pasar.
Aunque la marca ha lanzado una campaña para promocionar sus productos alrededor de esta estrategia promocional, lo cierto es que ahora tiene ante si un reto más que sortear.
En días pasados, activistas internacionales comenzaron a pedir a los usuarios que se sumen a un boicot contra Amazon, no realizando compras no visitando su sitio durante el Black Friday, con el fin de protestar por los ingresos y beneficios económicos que ha logrado gracias a la pandemia, mientras que pequeños negocios sufren perdidas de las que creen será muy difícil recuperarse.
Este problema parece venir por partida doble. Por un lado, el activista Yanis Varoufakis ha llamado a boicotear a Amazon durante este “viernes negro” y, en su lugar, apoyar a pequeños negocios.
El informe vino desde The Guardian, medio que aseguró que el activista publicó un video en el que asegura que “este boicot es porque no se trata de una compañía y ya; no de un mega monopolio. Es mucho más y más grave; se trata de un nuevo tecno-feudalismo”.
Adicional, una coalición internacional de ONG’s y gremios de líderes iniciaron un movimiento similar con la diferencia de que esperan que este freno a Amazon se extienda gasta las fiestas de fin de año.
Esta iniciativa, se ha lanzado desde el sitio 350.org cuenta con firmas de conocidos intelectuales como el profesor Noam Chomsky; además de Bernie Sanders, la alcaldesa de la ciudad de París, Anne Hidalgo, y GreenPeace, según informan desde el portal VoaNews.
Adicional a esto se han comenzado a generar protestas en diferentes bodegas de Amazon para exigir mejores condiciones laborales. Este problema ha surgido en mercados como Australia, Filipinas, Bangladesh, India, Polonia, Italia, Suecia, Luxemburgo, Francia, Estados Unidos y Brasil para exigir mejores condiciones de empleo.