De acuerdo con un reporte del medio español El País, el utilitario Ford Figo que se vende en el territorio nacional únicamente cuenta con bolsas de aire en la parte frontal como parte de su paquete básico de seguridad. En la mayoría de los países europeos, el mismo auto tiene un precio ligeramente inferior y cuenta, con las bolsas de aire, frontales y laterales, frenos ABS y control electrónico de estabilidad.
Asimismo, este mismo factor ocurre con otros autos de diferentes armadoras en sus versiones más básicas, el Peugeot 208, que en México y Brasil solamente monta bolsas de aires delanteras y frenos ABS, pero no tiene bolsas laterales que si se venden en el viejo continente.
Según el medio, este doble rasero entre lo estándares de seguridad de los vehículos fabricados para el país, a diferencia de naciones avanzadas, es moneda de cambio común en el segundo mayor mercado por ventas de América Latina, hasta el punto de que seis de los 10 modelos más vendidos en México no podrían, en su versión más económica, ser comercializadas en países de primer orden, de acuerdo con el programa de evaluación de vehículos nuevos para la región, Latin NCAP.
Para tratar de acabar con esta doble vara de medir los modelos comercializados dentro y fuera de México, Latin NCAP junto con la organización de la sociedad civil El Poder del Consumidor, piden a los 18 mayores fabricantes que se comprometan con un código ético para que los vehículos que se venden en el país ofrezcan el mismo nivel de seguridad que se ofrecen en otras latitudes.
Esto significa que se exige un trato igualitario para los consumidores con independencia del lugar en el que viven. La seguridad vial en México no es abordada como un problema principal, refiere el medio, en el país cada año pierden la vida más de 10 mil personas en accidentes de tráfico y más de 100 mil sufren lesiones de diversa consideración.
Asimismo, a esta realidad se deben sumar otros factores como lo son los autos chocolate que cruzan la frontera desde Estados Unidos sin cumplir con los requerimientos de seguridad; así como la elevada edad del parque vehícular mexicano, un factor que múltiples especialistas asocian directamente con la tasa de mortalidad en carretera.
La normativa mexicana posterga hasta 2022 requerimientos de seguridad muy básios en autos nuevos, como el ABS, incluso después de esa fecha, la legislación no exigirá que los coches recién salidos de fábrica cuenten con el sistema electrónico de control de estabilidad.
Ls exigencias mínimas para el mercado mexicano están por debajo de otras naciones del continente como Brasil y Argentina; sin embargo, exigir tales medidas también es un aspecto que el consumidor como tal debería de solicitar ya que se trata de aspectos que pueden salvar vidas.
Si bien en México, los datos de compra de vehículos nuevos han venido a la baja y a la alza la venta de autos usados en Monterrey, esto se generó por indicadores macroeconómicos y no como un rechazo de las personas a comprar unidades con estándares de calidad por debajo de la media internacional.
Es por ello que en la elección de un vehículo y la venta de carros usados en wanacar va más allá de un crédito o aspectos de conectividad, se deben tomar en consideración este tipo de medidas a fin de tener una mayor seguridad mientras se anda en el vehículo.