-
EspaƱa encabeza la lista con mĆ”s deĀ 300 mil millones de reproducciones de videos con informaciones falsas
Cuando Europa se encuentra inmersa en plenas elecciones al Parlamento Europeo, es natural la preocupaciĆ³n que surge (y que ha estado presente en los Ćŗltimos meses) sobre la posibilidad de injerencia a travĆ©s de las noticias falsas que tanto abundan en internet.
Ya es conocido por gran parte de la opiniĆ³n pĆŗblica los riesgos āy grandes ventajasā que pueden tener las comunicaciones a travĆ©s de las redes sociales, especialmente cuando se presentan este tipo de eventos polĆticos.
De hecho hace poco Facebook cerrĆ³ 21 pĆ”ginas que eran coordinadas desde Rusia y cuya funciĆ³n consistĆa en distribuir noticias falsas a paĆses como EspaƱa, Alemania o Reino Unido.
Fake News
SegĆŗn los datos de in informe de Avaaz reciĆ©n publicado, EspaƱa ocupa el primer lugar en cuanto a interacciones ā300 mil millones de reproducciones de videos cuyo contenido es falsoā dentro de los 500 mil millones que se han analizado en Europa en Facebook.
En el caso de WhatsApp, la situaciĆ³n tambiĆ©n es similar al obtenerse datos de que las informaciones falsas han llegado a cerca de 10 millones de usuarios.
Lo que ha dejado en evidencia este estudio sobre la distribuciĆ³n y consumo de noticias falsas es que precisamente la red social de la que es fundador Mark Zuckerberg se encuentra entre las tres primeras plataformas donde se difunde este tipo de informaciones.
De hecho no solo se trata de informaciones falsas sino de numerosos mensajes de incitaciĆ³n al odio los que en enormes cantidades inundan Facebook. Una muestra de ello ha sido la eliminaciĆ³n por parte de la plataforma de los perfiles de 21 pĆ”ginas āincluidas las tres mĆ”s notorias de extrema derechaā que en total sumaban mĆ”s de 1,7 millones de usuarios y cuyos mensajes de desinformaciĆ³n y odio incluĆan targets como la comunidad islĆ”mica, LGB, los catalanes independentistas o los partidos de izquierda.
SituaciĆ³n difĆcil de erradicar
Si bien es un problema al que las plataformas ahora han comenzado a dedicar mucha mĆ”s atenciĆ³n, su resoluciĆ³n no serĆ” fĆ”cil, pues la apertura de nuevas cuentas por parte de estos grupos, con datos falsos, no es nada complicada, por lo que al cerrarles una, prĆ”cticamente de inmediato pueden abrir otra.
Pero el trabajo de las plataformas debe seguir, pues la proliferaciĆ³n de informaciones falsas, no parece que vaya a disminuir, especialmente cuando ya han comprobado la influencia que puede tener en las campaƱas polĆticas.