• La pandemia impactó históricamente el tráfico aéreo de pasajeros.

• Tanto consumidores como trabajadores cuentan con una cierta responsabilidad para tener una buena experiencia de compra.

• Los usuarios no temen defender el servicio de una marca, siempre y cuando cuenten con un historial positivo a su favor.

Pasajeros ubicaron a un empleado “rompe maletas” en un aeropuerto, pero algunos usuarios han optado por defender su servicio.

El mundo del transporte aéreo se proclama como un sector indispensable en la cotidianidad de millones, siendo un importante elemento a la hora de considerar el continuo crecimiento económico, ya que de este dependen un sinfín de contratos de negocios, exportaciones, importaciones, y demás oportunidades a explorar que involucran un alto valor monetario de por medio.

Para tener en cuenta la importancia que la industria aeroportuaria conlleva en la actualidad, valdría la pena analizar los datos del gráfico de Statista donde muestra la evolución anual de los ingresos de transporte aéreo de pasajeros a nivel mundial, los cuales desde el 2009 y adjuntando 374 mil millones de dólares, crecieron constantemente hasta llegar a su máximo pico en 2019 y registrar 607 mil millones de dólares; poco después, se sufrió de una caída histórica de más del 60 por ciento su valor por la aparición de la pandemia en 2020 al adjuntar solo 189 mil millones.

A pesar de esto, el declive de casos por Covid-19 ha provocado que la industria regrese poco a poco a su normalidad, donde empleados de aeropuertos, aerolíneas y pasajeros se muestran nuevamente alimentando nuevamente la demanda en este servicio.

Hallan a empleado “rompe maletas” y abren debate en redes

Para aquellos que se muestran como pasajeros constantes en aeropuertos, seguramente les ha sucedido que en alguna ocasión su maleta por la que pagaron con exceso de peso y debe ir debajo del avión sufrió de algunos “desperfectos” en el camino, poniendo en juego la integridad de la misma, siendo uno de los temores más fuertes a la hora de viajar, ya que no solamente la maleta queda expuesta, sino lo que guarda en su interior.

Este tipo de situaciones suelen darse con relativa continuidad, ya que estos maletines se someten a todo un proceso en el que son manipuladas por parte algunos empleados y sistemas automatizados que interactúan con ellas.

En esta ocasión, algunos usuarios en un aeropuerto captaron a un empleado que se encontraba lanzando las maletas de los pasajeros para que pudieran ser subidas a un avión; asimismo, este no pudo esconder la manija de una maleta en particular, por lo que igualmente decidió lanzarla, hecho que abrió un debate en las redes.

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En el segundo video mostrado, donde una influencer reaccionó al video, los usuarios atacaron y defendieron a este empleado del aeropuerto que colocaba las maletas por la banda, haciendo todo tipo de comentarios como “que pagues el exceso no hace que el maletero tenga más fuerza o se lastime menos la espalda, hacen lo que pueden, te lo aseguro”, “¿y por qué el dueño no la entregó con la manija guardada?”, “así tiraron mi maleta para las vacaciones, recién comprada”, “muchos deben de entender que en aviación tenemos el tiempo contado y más en plataforma”, entre otro tipo de comentarios reaccionando al video.

Cuando los consumidores defienden a las empresas

Tanto marcas como consumidores cuentan con algunas responsabilidades para obtener una experiencia de compra positiva, donde ambos actores deben cumplir con una serie de pasos o lineamientos para evitar caer en una inconsistencia que se pudo haber evitado.

Teniendo esto en cuenta y cuando los errores provienen por parte del consumidor, los usuarios han demostrado su apoyo hacia las empresas que en esas ocasiones que muestran como “víctimas”, ya que en un problema de servicio no viene solamente por parte del prestador del mismo; no obstante, para lograr esto las marcas deben asegurarse de brindar un resultados eficientes de manera constante.

Ejemplo de esto lo encontramos hace un tiempo cuando un consumidor de Uber Eats optó por quejarse con la marca por un tipo de publicidad engañosa, donde los alimentos mostrados en la plataforma no se parecían a los recibidos; no obstante, los usuarios defendieron al servicio de la app mostrándole al usuario que se encontraba equivocado y que en realidad fue culpa suya por no leer las especificaciones del producto.

Los consumidores no temen en defender a sus marcas, siempre y cuando brinden un servicio de calidad de manera constante.

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