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Emirates, que es una de las aerolĂneas mĂĄs poderosas en el mundo, ha dado una sentencia a sus empleados: vacunarse contra el C0VID-I9 o pagar por las pruebas.
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Mientras que en Emirates se ha dado la orden a sus trabajadores de que tienen que vacunarse o pagar por las pruebas para poder abordar un vuelo, en otras industrias como la de fast food, empresas como McDonaldâs han comprado vacunas para inocular a sus empleados.
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Este tipo de movimientos se hacen en un momento en que el contagio por COVID-19 sigue desafiando.
Las aerolĂneas como Emirates y cualquier industria afectada por la contingencia sanitaria, han tenido que tomar decisiones operativas muy importantes, con las que buscan contener el contagio por COVID-19.
Este patĂłgeno ha establecido una serie de desafĂos y la vacunaciĂłn para contenerlo se ha convertido en algunas empresas, incluso en una prestaciĂłn que no tiene desperdicio y por el contrario, nos recuerda lo necesario que es inocularse ante este patĂłgeno.
La sentencia que ha hecho Emirates nos recuerda lo importante que es mantener procesos operativos contundentes, con los que se logre combatir este patĂłgeno.
Nuevas reglas en Emirates
Emirates, que es una de las aerolĂneas mĂĄs poderosas en el mundo, ha dado una sentencia a sus empleados: vacunarse contra el C0VID-I9 o pagar por las pruebas para poder abordar sus vuelos.
El proceso de vacunaciĂłn de empleados de grandes empresas se ha convertido en un gran tema de anĂĄlisis, con todo tipo de casos y con Emirates, la aerolĂnea ha tomado la decisiĂłn de que los empleados que no estĂ©n inoculados paguen por sus pruebas.
La sentencia ocurre en un momento de gran actividad operativa, como el certificar que todas las personas que abordan un vuelo demuestren con pruebas que no son positivas a C0VID-I9 o pidiendo que lleven puesto sus cubrebocas entre otros protocolos sanitarios.
Esta nueva norma ha sido revelada por Reuters, que ha tenido acceso a un mail interno en donde se advierte que a partir del 15 de marzo, los trabajadores que no estén vacunados deberån pagar por la prueba contra C0VID-I9.
La medida es justificada por la aerolĂnea como una forma de adelantarse a las regulaciones regionales que ciertos paĂses tomarĂĄn a futuro en cuanto a personas vacunadas y las que aĂșn no se inoculan, por lo que Emirates argumenta que es fundamental contar con una fuerza de trabajo preparada, por la seguridad de las operaciones de la aerolĂnea.
Los empleados que no deberån pagar por su prueba son los que estån por recibir su segunda dosis de vacuna, los que evidentemente ya se encuentran inoculados, los que estån registrados para recibir su primera dosis, quienes por alguna razón médica no pueden hacerlo o quienes estån infectados del c0ronavirus o se encuentran recuperåndose de una infección.
Por cierto que esta aerolĂnea reiniciarĂĄ operaciones en MĂ©xico a partir del 2 de julio, con cuatro posibles frecuencias a la semana.
Antes de que se desatara la pandemia, la empresa operaba un vuelo diario de la ruta DubĂĄi – Barcelona – Ciudad de MĂ©xico, a bordo de un 777-200.
La vacuna se convierte en prestaciĂłn
Mientras que en Emirates se ha dado la orden a sus trabajadores de que tienen que vacunarse o pagar por las pruebas para poder abordar un vuelo, en otras industrias como la de fast food, empresas como McDonaldâs han comprado vacunas para inocular a sus empleados en paĂses como Filipinas, donde la estrategia fue de comprar un lote de AstraZeneca, mismo que se dividiĂł, uno donĂĄndolo al gobierno de ese paĂs, para apoyar en la campaña de vacunaciĂłn y el otro administrĂĄndolo a empleados de la cadena.
Este tipo de movimientos se hacen en un momento en que el contagio por COVID-19 sigue presente, ante un proceso de vacunaciĂłn que parece ofrecer la promesa de acabar con ello.
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